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La muerte del paraguas
RAYUELA 1 [2]bdesafiando al destino que esta vez logró alcanzarle,
y no en la forma de un rayo fulminante,
sino de una rasgadura que se volvió herida
y luego se volvió muerte.
que no protege, que no da cobijo
de los llantos del cielo?
trataste de usar al aire como cómplice
para no abandonarme,
para no abandonarte.
y uno a uno se fueron rompiendo,
volviéndose astillas brillantes,
tendones retorcidos enredados con la piel
que antes solía cubrirles.
inevitable tal vez
pero no por eso menos trágico y digno,
por los tiempos compartidos,
por las tormentas que juntos combatimos.
para recordarte entero,
como cuando nos conocimos
en esa banca del parque
en que alguien te había olvidado.
sin saber quien habías sido,
que habías enfrentado,
como habías vivido.
siendo abrazado por las aguas del infinito,
guardé un minuto de silencio
antes de seguir mi camino,
bajo una lluvia inclemente
que nunca se atrevería a admitirlo,
pero también lloraba por ti.
Si llegaste hasta acá muchas gracias por leer este publicación y dedicarme un momento de tu tiempo. Hasta la próxima y recuerda que se vale dejar comentarios.
