Los Scouts (o muchachos exploradores), son una hermandad fundada en 1907, durante sus 112 años de permanencia a nivel mundial, y con presencia en casi 180 países, se puede decir que es la agrupación de jóvenes más sólida y concurrida de la tierra.

La Asociación de Scouts de Venezuela, desde 1913, ha formado a miles de jóvenes a través de su programa educativo al aire libre, fomentando los valores de hermandad, respeto, tolerancia, disciplina y honor, todo esto por medio de su promesa y ley, las actividades al aire libre, el arte de acampar y convivir con la naturaleza, respetándola, amándola y sirviéndose de ella en forma racional.

El escultismo hoy en día se ha adaptado a la realidad de muchos jóvenes, de acuerdo a la situación y costumbres de cada país, sin embargo, mantiene su esencia y trabaja bajo una misma filosofía: "Aprender haciendo".

En los campamentos, en sus noches, hay una que es sumamente especial, es el momento "mágico", es el momento donde todos los scouts nos reunimos para divertirnos, disfrutar de un momento donde la amistad se pone de manifiesto, algunos comparten sus dones de actores, de poetas, de oradores, de animadores, es el momento en que todos cantamos juntos, es "La Fogata".

Una fogata grande, que genere buen calor e iluminación, una fogata que inicia con un acto protocolar, muy espiritual, donde cantamos reímos y compartimos emociones, donde nos encontramos con nosotros mismos. En estas fogatas es donde los scouts le vemos más sentido a la vida.