Desde hace algún tiempo he tenido el deseo de compartir con ustedes un poco acerca de un tema que para mi es de suma importancia ya que de eso depende el rendimiento emocional y educativo de mis hijos.
Muchos de ustedes se preguntarán de que estoy hablando y a dónde quiero llegar con todo esto, se trata nada más y nada menos de los dispositivos electrónicos como: teléfonos, computadoras, tablets incluso televisores y consolas de video juegos. En estos tiempos la tecnología ha envuelto a miles de niños y jóvenes en juegos y entretenimiento que muchas veces no benefician en nada.
Tengo cuatro hijos y para serles honesta donde vivíamos anteriormente ellos no tenían acceso a ningún dispositivo, claro en este caso porque no teníamos ni teléfono ni tablet y no necesitaban nada de eso para jugar y divertirse. Vivíamos en el campo en un pueblo pequeño en medio de la sabana rodeados de árboles y naturaleza.
Desde que nos mudamos a la ciudad de Maracay, mi esposo tenía su teléfono y computadora y era muy raro cunado ellos tenían acceso a estos dispositivos. Luego de un tiempo compramos otra computadora a partir de allí digamos que empezaron a tener más contacto. Cuando me compro mi teléfono de vez en cuando se los presto, eso si siempre atenta a lo que están viendo o jugando.
Pero digamos que últimamente he notado que se han vuelto adictos a esos juegos, y para evitar que su cerebro y sus niveles de dependencia se sigan alimentando con cosas que no son nada productivas, hemos considerado en disminuirlo y que solo lo usen para cosas muy importantes o que tengan relación con aprendizaje y valores, ya que en algunas ocasiones hemos notado mucha ansiedad sobre todo en los dos varones, se ponen intensos y no encuentran qué hacer cunado no tienen el aparato en sus manos y eso no es una buena señal.
En vista de todo los cambios que hemos notado, estamos más pendientes de ellos y le disminuimos un poco el uso de las pantallas es decir, teléfono y computadora. Incluso, cuando han cometido un error o falta, una de las consecuencias es que por varias días tendrán CERO DISPOSITIVOS.
Últimamente mi hijos menor de cuatro años, me he dado cuenta que se está volviendo adicto ya que cuando sus hermanos tienen el teléfono el se les acerca para ver, y cuando no lo dejo se pone malcriado y alma berrinches. Cuando puede se me acerca a mi para decirme que le preste el teléfono y obviamente no se lo presto y ya se imaginarán lo enojado que se pone.
Hace poco me dejo sorprendida porque me dijo que quería un teléfono como el mío así de grande, porque según él no tiene. Lo que me sorprendió es que se atreviera a pedirme un teléfono y a su edad apenas cuatro añitos. ¡Qué barbaridad!
Me dio mucha risa eso, y me llevo a pensar que en mis tiempos yo vine teniendo un teléfono celular a mis quince años y hoy en día ya niños con tres años tienen acceso a teléfonos y hasta me atrevo a decir que lo manejan mejores que los propios padres.
Pero pobre cuando se lo quitan o no se lo prestan, se ponen como locos y el berrinche que no se imaginan.
No estoy en contra de que los niños de vez en cuando puedan jugar o mirar un video en el teléfono o la computadora siempre y cuando estén bajo la supervisión de sus padres. Aunque de vez en cuando, les animamos a que estén en modo CERO DISPOSITIVOS.
Nada como ver a nuestros hijos jugar, correr, divertirse, saltar la cuerda, jugar al escondite o incluso haciendo lo que más les guste, jugar al deporte, ajedrez, memoria entre otras cosas y no tenerlos qué ver encerrados en el cuarto si salir y sin divertirse con otros niños.
Esto ha sido todo, gracias por la visita.
ENGLISH
For some time now I have had the desire to share with you a little bit about a topic that for me is of utmost importance since the emotional and educational performance of my children depends on it.
Many of you may be wondering what I am talking about and where I am going with all this, it is nothing more and nothing less than electronic devices such as: phones, computers, tablets, even televisions and video game consoles. In these times technology has involved thousands of children and young people in games and entertainment that often do not benefit anything.
I have four children and to be honest where we lived before they did not have access to any device, of course in this case because we had no phone or tablet and they did not need any of that to play and have fun. We lived in the countryside in a small town in the middle of the savannah surrounded by trees and nature.
Since we moved to the city of Maracay, my husband had his phone and computer and it was very rare when they had access to these devices. After a while we bought another computer and from then on they started to have more contact. When I buy my phone from time to time I lend it to them, but I always keep an eye on what they are watching or playing.
But let's say that lately I have noticed that they have become addicted to these games, and to prevent their brains and their dependency levels continue to feed with things that are not productive at all, we have considered to reduce it and only use it for very important things or that are related to learning and values, because sometimes we have noticed a lot of anxiety especially in the two boys, they get intense and do not find what to do when they do not have the device in their hands and that is not a good sign.
In view of all the changes we have noticed, we are more attentive to them and we reduce the use of the screens a bit, i.e. phone and computer. Even, when they have made a mistake or fault, one of the consequences is that for several days they will have ZERO DEVICES.
Lately my youngest four year old, I have noticed that he is becoming addicted because when his siblings have the phone he comes to them to see, and when I do not let him get spoiled and soul tantrums. When he can he comes up to me to tell me to lend him the phone and obviously I don't lend it to him and you can imagine how angry he gets.
He recently left me surprised because he told me he wanted a phone like mine that big, because according to him he doesn't have one. What surprised me is that he dared to ask me for a phone and at his age just four years old. how barbaric!
I laughed a lot at that, and it made me think that in my time I had a cell phone when I was fifteen years old and today children as young as three years old have access to phones and I even dare to say that they handle them better than their own parents.
But when they take it away or don't lend it to them, they go crazy and throw a tantrum you can't imagine.
I'm not against kids occasionally being able to play games or watch a video on the phone or computer as long as they are under parental supervision. Although from time to time, we do encourage them to be in ZERO DEVICES mode.
Nothing like seeing our children playing, running, having fun, jumping rope, playing hide and seek or even doing what they like the most, playing sports, chess, memory among other things and not having them locked in the room without going out and not having fun with other children.
That's all, thanks for the visit.