Archus estaba esperando a Marin. Quedaron en verse en la biblioteca del edificio Arslet. Miraba su reloj. Ya habían pasado cinco minutos de la hora acordada. Eso no era buena señal, pensó Archus. Sabía que el retraso podía significar algún percance importante. Sabía que tenía que cumplir el código en caso de algún imprevisto. Pero decidió esperar, arriesgándose a ser capturado.
Marin iba con sigilo rumbo al edificio Arslet. Se había comunicado con Archus la noche previa al encuentro, y para llegar tenía que seguir una ruta diferente. Salió de su casa y tomó la avenida Roscot. Luego, cruzó por la calle pirastet, y de ahí siguió subiendo y bajando por varias calles y callejones, lugares que por lo general estaban casi siempre solos.
Aquella mañana, sin embargo, Marin no contaba con que la policía estaba haciendo redadas. Así que trató de disimular su nerviosismo saludando a los agentes y sonriendo. Desde que salió de casa no sacó la mano de su bolsillo, acariciando suavemente el artefacto que debía llevar hasta la biblioteca del edificio Arslet.
Archus ya se estaba impacientando. Se paseó por los diferentes estantes, contemplando los libros, leyendo los títulos. Se detuvo un momento y volvió al título que le llamó la atención: Coartadas inesperadas. Lo tomó y empezó a leerlo. Así se calmó un poco, y es que ese había sido uno de sus libros favoritos en su etapa escolar. Leerlo le trajo muchos recuerdos. Recordó el tiempo en que la vida era más fácil, en el que no tenía que andar escondiéndose ni tramando conspiraciones para conseguir su libertad y la de los suyos, y entonces pensó en el futuro del joven Marin si lo capturaban.
El código dictaba que, en caso de no producirse el encuentro, él tenía que retirarse e ir al refugio, no podía ir a su propia casa, y mucho menos contactar al otro individuo. Después de pasados quince minutos Archus tomó la decisión de retirarse. Iba saliendo de la biblioteca cuando una luz blanca le llamó la atención. Primero fue como un destello, luego fue creciendo cada vez más, y se imaginó lo impensable…
Un oficial detuvo a Marin, le pidió su identificación, y al ver que tenía la mano en el bolsillo también le pidió que le mostrara todo lo que llevaba en ellos. Marin accedió con nerviosismo. Sabía que lo que llevaba era peligroso y que podía ser arrestado por ello.
Sabía cómo funcionaba el dispositivo, al menos en teoría. Le dijeron que en caso de que lo atraparan tenía que activarlo, sin importar las consecuencias, pero ¿cuáles podrían ser las consecuencias? Era accionar el dispositivo o entregárselo al agente que se lo pedía.
Marin lo sacó y se lo mostró al agente, quien estiró la mano para recibirlo, pero nunca llegó a tocarlo, pues una luz blanca le provocó tales espasmos que se lanzó al suelo. Lo mismo ocurrió con todos los que estaban allí.
Archus comprendió que no había nada más qué hacer. Las personas contemplaban el destello mientras el hombre siguió su rumbo. Ahora, ¿cómo explicaría la tragedia y la pérdida de la única esperanza que tenían para vencer a su enemigo?
English version
Archus was waiting for Marin. They arranged to meet in the library of the Arslet building. He looked at his watch. It was already five minutes past the agreed time. That was not a good sign, Archus thought. He knew that the delay could mean some major incident. He knew he had to comply with the code in case of some unforeseen event. But he decided to wait, risking being captured.
Marin was stealthily making his way to the Arslet building. He had communicated with Archus the night before the meeting, and to get there he had to follow a different route. He left his house and took Roscot Avenue. Then he crossed Pirastet Street, and from there he went up and down several streets and alleys, places that were usually almost always alone.
That morning, however, Marin did not count on the fact that the police were making raids. So he tried to conceal his nervousness by waving to the officers and smiling. Since he left the house he did not take his hand out of his pocket, gently caressing the artifact he was supposed to carry to the library of the Arslet building.
Archus was already growing impatient. He wandered around the different shelves, contemplating the books, reading the titles. He stopped for a moment and returned to the title that caught his eye: Unexpected Alibis. He picked it up and began to read it. He calmed down a bit, because it had been one of his favorite books during his school years. Reading it brought back many memories. He remembered the time when life was easier, when he didn't have to go around hiding or plotting conspiracies to get his freedom and that of his family, and then he thought about the future of the young Marin if he was captured.
The code dictated that if the meeting did not take place, he had to withdraw and go to the shelter, he could not go to his own home, much less contact the other person. After fifteen minutes had passed Archus made the decision to leave. He was leaving the library when a white light caught his attention. At first it was like a flash, then it grew brighter and brighter, and he imagined the unthinkable...
An officer stopped Marin, asked for his ID, and seeing that he had his hand in his pocket also asked him to show him everything he had in them. Marin nervously agreed. He knew that what he was carrying was dangerous and that he could be arrested for it.
He knew how the device worked, at least in theory. He was told that in case he was caught he had to activate it, no matter what the consequences, but what could the consequences be? It was either activate the device or hand it over to the agent who asked for it.
Marin took it out and showed it to the agent, who stretched out his hand to receive it, but never got to touch it, as a white light caused him to spasm so much that he threw himself to the ground. The same thing happened to everyone who was there.
Archus realized that there was nothing more to do. People stared at the flash while the man continued on his course. Now, how would he explain the tragedy and the loss of the only hope they had to defeat their enemy?
Translated with DeepL.com (free version)