La más desarmada ternura, así como el más sangriento de los poderes, necesitan la confesión.
The most unarmed tenderness, as well as the bloodiest of powers, needs confession.
No dudé un instante en llamar al doctor otra vez, han pasado sólo minutos desde que ojeé el cuerpo contaminado de Alicia, mi esposa. Los forúnculos blancos que brotaban de su cuerpo eran de aspecto repulsivo. Tenían una propiedad física iluminada y suave como la jalea. Estuve al teléfono varias horas esperando a que el doctor me atendiera, ¡Oh Dios necesitaba respuestas rápidamente!
Finalmente comenzaron a sonar los tonos de llamada, eran las 8:43 am, no creo que todavía se encuentre en su consultorio o el hospital. Al estar un rato a la espera, finalmente alguien me respondió.
—¡Aló! Buenos días. —Respondió una mujer de mediana edad.
—¿Sí, buen día? ¿Con el doctor Martínez por favor? Es de carácter urgente, es para que venga a revisar nuevamente a una paciente que él mismo vino a ver anoche, las cosas se han vuelto más… graves…
—Lo siento, mi padre no se encuentra, habla su hija. Salió al consultorio a trabajar, puede hallarlo allí.
I didn't hesitate for a moment to call the doctor again, it's been only minutes since I looked at the contaminated body of Alicia, my wife. The white boils growing on her body were repulsive in appearance. They had a light, jelly-like physical property. I was on the phone for several hours waiting for the doctor to come to me.
Finally the ringing tones began to sound, it was 8:43 am, I don't think he is still in his office or hospital. As I waited for a while, someone finally answered me.
—Hello! Good morning. A middle—aged woman answered.
—Yes, good morning? —Dr Martinez please? It's urgent, it's for him to come and check again a patient he himself came to see last night, things have become more... serious...
—I'm sorry, my father's not here, this is his daughter. He went to the office to work, you can find him there.
En ese momento me desconcentré. Observé el entorno y me di cuenta que no había ni la más mínima posibilidad de trasladar a Alicia al consultorio del doctor. Primeramente, no quería tocar las extrañas pústulas que sobresalían del cuerpo de mi esposa. No sabía si eran contagiosas o en su gravedad nocivas. Decidí insistir por la presencia del doctor pero no quería dejar a Alicia sola, así que me quedé con ella.
—Oh... ¿podría dejarle este mensaje? —Contesté —Dígale que Alicia ha empeorado, se ve tranquila pero… su cuerpo está lleno de protuberancias enormes. Por favor no lo olvide, el doctor Martínez es el único que puede ayudarme. Es la única persona en quien confío.
—Está bien, no se preocupe, en cuanto llegue mi padre le informaré. —Contestó con voz serena pero desconcertada.
Colgué el teléfono inseguro y preocupado. Miré detenidamente el estado de Alicia y me causaba un estupor de pena. La vi tan plácida, parecía que no fuese capaz de hacer daño. De repente sentí una incipiente curiosidad, que fue creciendo gradualmente, hasta el punto de querer indagar con mis propios dedos las rarezas de su cuerpo.
Me acerqué lentamente con los ojos bien abiertos, y extendí mi mano obedeciendo el mandato de mi inquietud. Al estar lo suficientemente cerca, un sobresalto fuerte como una reacción dolorosa provino de ella y di un paso atrás. Comenzó a gruñir y con los abiertos hasta el límite me miró. Sentí la sensación de que iba hacia a mí a atacarme.
At that moment I lost my concentration. I looked around and realized that there was not the slightest possibility of moving Alicia to the doctor's office. First of all, I didn't want to touch the strange pustules sticking out of my wife's body. I didn't know if they were contagious or in their harmful severity. I decided to insist on the doctor's presence, but I didn't want to leave Alicia alone, so I stayed with her.
—Oh... could you leave him this message? —I answered, "Tell him that Alicia has gotten worse, she looks calm but... her body is full of huge bumps. Please don't forget, Dr. Martinez is the only one who can help me. He's the only person I trust.
—All right, don't worry, as soon as my father arrives I'll inform him. -He replied in a calm but puzzled voice.
I hung up the phone unsure and worried. I looked carefully at Alicia's condition and it was causing me a stupor of sorrow. I saw her so placid, it seemed as if she was not capable of doing any harm. Suddenly I felt an incipient curiosity, which grew gradually, to the point of wanting to investigate with my own fingers the oddities of her body.
I approached her slowly with my eyes wide open, and extended my hand in obedience to the command of my restlessness. When I was close enough, a strong shock like a painful reaction came from her and I took a step back. She began to grunt, and with her eyes wide open she looked at me. I felt the sensation that she was going to attack me.
Me recargué con espanto. Sus manos iban con la intención de hacerme daño pero yo la eludí. En mi preocupación lacerante le preguntaba: —¡Que te ocurre mi amor! ¿Qué estás haciendo? —pero ella solo gruñía como un animal rabioso.
Fue en ese momento, en cuanto estuve lo suficientemente alejado, ella se calmó y luego se recostó en la cama de nuevo dándome la espalda. Tal parecía que aquello que la afectaba también la perjudicó psicológicamente. ¡Ay el negro abismo de sus ojos se volvió opaco! ¡Se convirtió en una laguna nocturna cubierta de neblina! No tuve otra reacción más que llorar.
Tuve que salir de ahí inmediatamente a buscar ayuda, me di cuenta que la espera no era buena idea ya que la situación podía empeorar. Fui directamente al consultorio del doctor Martínez, quería que me explicara lo que estaba pasando.
Al llegar, estaba agitado y con el rostro pálido. Afortunadamente el doctor me vio y pudo atenderme y le expliqué con oraciones casi entre cortadas lo acababa de pasar. Asintió con la cabeza tomando como prioridad mi asunto y le dijo a su secretaria que cancelara el resto de sus citas. Se embarcó conmigo en mi auto y en el camino, de manera más pausada, le expliqué lo que pasaba.
—¿Protuberancias enormes y blancas? —Me dijo el doctor sorprendido.
—Si doctor, no sé lo que son pero le están afectando de una manera que no se imagina. Espero que todavía ella siga ahí.
—¿Cómo? ¿Ha intentado huir?
—Para nada, pero se puso agresiva al momento de acercarme a ella, no sé qué hacer doctor, por favor, ayúdeme a salvarla.
—Tranquilo hijo, vamos a ver qué es lo que tiene y que lo causa, esperemos que no sea nada grave, Dios bendito.
Quedamos en silencio durante unos minutos, el doctor había quedado inerte y pensativo mientras que yo estaba hecho un manojo de nervios. Mientras conducía solo pensaba en Alicia y que si aquella terrible circunstancia me la quitaba yo no sabría qué hacer. Estaba loco y desesperado, pero aún me quedaba por enfrentar lo peor.
I was recharged with fright. Her hands were meant to hurt me but I avoided her. In my lacerating concern I asked her: -What's wrong with you my love! What are you doing? -but she only grunted like a rabid animal.
It was at that moment, as soon as I was far enough away, she calmed down and then lay down on the bed again with her back to me. It seemed that whatever was affecting her was also affecting her psychologically, and the black chasm in her eyes became opaque, it became a mist-covered night pond! I had no other reaction but to cry.
I had to get out of there immediately to get help, I realized that waiting was not a good idea since the situation could get worse. I went straight to Dr. Martinez's office, I wanted him to explain what was happening.
When I got there, he was agitated and had a pale face. Luckily, the doctor saw me and was able to attend to me and I explained to him with prayers almost between cuts that I had just passed through. He nodded his head, making my business a priority, and told his secretary to cancel the rest of his appointments. He got into my car with me and on the way, more slowly, I explained what was going on.
—Huge, white lumps? —said the doctor in surprise.
—Yes, doctor, I don't know what they are, but they are affecting you in ways you cannot imagine. I hope she is still there.
—How? —Has she tried to run away?
—Not at all, but she became aggressive when I approached her, I don't know what to do, doctor, please help me save her.
—Calm down son, let's see what's wrong with her and what's causing it, let's hope it's nothing serious, God bless.
We remained silent for a few minutes, the doctor had remained inert and thoughtful while I was a bundle of nerves. As I drove along I thought only of Alice and that if that terrible circumstance were to take her away from me I would not know what to do. I was crazy and desperate, but I still had to face the worst.
Al llegar al apartamento, fuimos directamente a la habitación y para nuestra sorpresa Alicia ya no estaba recostada en la cama, sino junto a la ventana. Nos quedamos asombrados y más aún el doctor, al vislumbrar por primera vez aquellas grandes prominencias en su cuerpo. El médico sorprendido se echó para atrás y vociferó palabras de espanto.
—¡Dios mío! ¡Está sucediendo de nuevo!
Continuará...
When we arrived at the apartment, we went straight to the room and to our surprise Alicia was no longer lying on the bed, but by the window. We were astonished, and even more so the doctor, when he saw for the first time those big prominences on her body. The surprised doctor backed up and shouted words of fright.
—My God! —It's happening again!
To be continued...