Pensamos que solo sería un caso aislado. Grande fue la sorpresa cuando se registraron más y más nacimientos de estos bebés con piel rojiza, ojos vidriosos y formas extrañas. Los relatos del doloroso proceso de gestación iban acorde a las cifras de madres que fallecían durante el parto, si es que llegaban hasta ese punto.
Además tenían que ser mantenidos con vida artificialmente, ya que poseían un organismo un tanto distinto al nuestro. Y conforme iban creciendo, de sus pieles y lo que parecían cabellos en llamas, comenzaban a emanar un gas que al final resultó ser tóxico para "nosotros".
Ahora somos menos, infértiles y debemos usar máscaras de gas en todo momento. Nunca fue la supervivencia del más apto. No. Ellos pusieron a nuestro propio planeta en nuestra contra.
Imagen cortesía de @saulos
Post creado para participar del Extraño concurso No. 32 - Hive Mexico