Salzburgo es una ciudad cargada de arte, donde quiera que pases puedes conseguirte artistas revolucionando las calles. Cabe destacar que cada año se celebra uno de los festivales más importantes del mundo para la música y el teatro como lo es el Salzburger Festspiele, por lo que cada verano la ciudad reúne turistas de todas partes del mundo.
Otro punto turístico para visitar en Salzburgo es el barrio de la catedral, lugar donde ejercieron poder el principado y obispos. Compone todo el cazco histórico y aquí también se encuentra el monasterio Benedicto de San Pedro, lugar donde Mozart estrenó la misa en do menor, la primera misa que compuso Mozart que no se tratase de un encargo político, sino como voto por su matrimonio con Constanze Weber. Particularmente en cuanto a música académica, en mi opinión, es una de las obras más bonitas del compositor y escuchar el solo del et incarnatus est en ese lugar con esa acústica fue una experiencia mágica.
El palacio de Mirabell, famoso por su estilo barroco y sus bellos jardines, fue construido por el príncipe-arzobispo Wolf Dietrich, el lugar ideal para tomar fotos. La mayoría de los espacios de este lugar pertenecen al estado y son de uso gubernamental. Lo que significa que son pocos los espacios abiertos para turistas. Sin embargo vale la pena la visita.
La institución del mozarteum, su nombre en memoria al compositor. Es una escuela superior de música, muy importante en la ciudad donde tuve el honor de estar con mi familia musical para ese entonces. Fue uno de los conciertos más bonitos que he tenido en mi vida musical. La conexión con el público y mis compañeros hace de ese concierto algo que recordaré toda mi vida.
Comparto contigo esta pequeña remembranza y agradezco tu tiempo por acercarte a leer.
Si te gustó este post, te invito a leer mi anterior experiencia viajando a Nueva York
@vivitinerante/mi-verano-en-nueva-york-my-summer-in-new-york