Excelente ejercicio, como siempre, el que nos propone nuestra amiga @damarysvibra en su iniciativa en su columna Integrales y en Expansion.
Me hizo recordar mis cuentos de animales, tuve una época en que me gustaba escribir cuentos representando la fauna humana, cada quien era un animal y es que solía ver a las personas y decía en mi mente: «se me parece un águila, esta persona es una ardilla, este un caballo, y así iba, luego sucedían situaciones y yo creaba mis historias, como una especie de fábula, que me hacía divertir mucho.
Me he visto como una araña, cuando me agarran esas ganas de tejer y no suelto el hilo; pero para este ejercicio no me siento así, porque la idea de atrapar en mis telas a una presa no coincide con mi manera de ser. Tuve mi época de elefantes, incluso llegué a comprar de diferentes tamaños para coleccionarlo; pero en los últimos tiempos me ha estado ocurriendo algo con los perro. Me atraen mucho, me llaman la atención, voy a ir por la calle y si hay un perro no puedo evitar ver su comportamiento con los otros y hasta les hablo, me hace gracia es algo que disfruto mucho.
Ser perro es tener una condición de apego, de amistad, de estar allí. Mis hijas y nietos tienen un perrito, que cuando estoy con ellos, no se me despega, y exige de mí que lo abrace, que lo mime, y hasta se pone bravo y gruñe si yo no respondo positivamente a sus demandas de cariño, y esto ha sido desde que nos conocimos: una especie de amor a primera vista.
Me divierte esa mirada fija, ese verme y verme como que quisiera sacar de mis pensamientos, un mensaje para él. A mí me fascina se llama Willy y es un perro feliz, creo que es el perro más feliz del mundo, porque todas las personas que están a su alrededor lo quieren y lo miman, incluyéndome, por supuesto.
Así como vive este perro, creo que es la condición perfecta para ser ese animal, porque él no entiende que es perro, él cree que es humano y donde nosotros estemos, él está allí. Corretea con los niños, se une a sus juegos, disfruta de ese correr y gritar, tiene sus mañas para comer, demuestra con sus gestos si está feliz o está resentido, se asusta, y es selectivo con la gente.
Yo le caí bien desde un comienzo y fue una fortuna para mí, porque me gusta que él tenga esa ese trato hacia mí; pero hay personas que han ido a la casa de mi hija en muchas oportunidades y siempre que van invariablemente Willy les ladra y se ve que no los quiere.
Por qué me identifico entonces para este ejercicio con un perro, porque creo que soy amistosa, pero si alguien no me cae, puedo apartarme, pero si por el contrario, es mi amigo, esa persona puede conseguir en mi fidelidad total, por el tiempo que Dios quiera. Tengo amistades una con más de 60 años de antigüedad, desde que estudiábamos segundo grado, otras, con más de 40 años y el cariño está intacto.
Recientemente, tuve un perro, pero tuvimos que darlo en adopción porque estaba creciendo demasiado, esta casa es muy pequeña, lo llevamos a la casa de unos amigos que lo cuidan muy bien, el perro tiene un patio grande para corretear y jugar, visité a estos amigos luego de más de un mes sin ir y el perro se volvió loco al verme, tuve que abrazarlo para que se pudiera quedar tranquilo.
Ser perro significa tener buena memoria, cuidar a las personas que tenemos en nuestro entorno, ser agradecidos, no ser rencorosos, ser vigilantes de nuestros hijos, protegerlos cuando son cachorros y alimentarlos bien, creo que todo eso yo lo tengo. Soy una perra en el mejor sentido de la palabra.
Gracias por tu amable lectura.
Mi contenido es original
He utilizado el traductor de Google.
Imágenes propias.
English Version
Excellent exercise, as always, the one proposed by our friend @damarysvibra in her initiative in her column Integrales and in Expansion.
It made me remember my animal stories, I had a time when I liked to write stories representing the human fauna, each one was an animal and I used to see people and say in my mind: "this person looks like an eagle to me, this person is a squirrel, this one is a horse, and so on, then situations happened and I created my stories, like a kind of fable, which made me have a lot of fun.
I have seen myself as a spider, when I get the urge to weave and I don't let go of the thread; but for this exercise I don't feel that way, because the idea of trapping prey in my webs doesn't match my way of being. I had my time with elephants, I even bought them in different sizes to collect them; but lately something has been happening to me with dogs. I am very attracted to them, they draw my attention, I go down the street and if there is a dog I can't help but see their behavior with the others and I even talk to them, it makes me laugh, it's something I really enjoy.
Being a dog is having a condition of attachment, of friendship, of being there. My daughters and grandchildren have a little dog, who when I am with them, doesn't leave me alone, and demands that I hug him, that I pamper him, and even gets angry and growls if I don't respond positively to his demands for affection, and this has been the case since we met: a kind of love at first sight.
I find that fixed gaze amusing, that he looks at me and sees me as if I wanted to get a message for him out of my thoughts. I love that his name is Willy and he is a happy dog, I think he is the happiest dog in the world, because all the people around him love him and pamper him, including me, of course.
The way this dog lives, I think it is the perfect condition to be that animal, because he does not understand that he is a dog, he thinks he is human and wherever we are, he is there. He runs around with the kids, joins in their games, enjoys running and shouting, has his own habits when it comes to eating, shows with his gestures whether he is happy or resentful, gets scared, and is selective with people.
He liked me from the start and it was a blessing for me, because I like that he treats me that way; but there are people who have gone to my daughter's house on many occasions and every time they go, Willy invariably barks at them and it is clear that he does not like them.
Why do I identify myself with a dog for this exercise? Because I think I am friendly, but if someone doesn't like me, I can move away, but if on the contrary, it is my friend, that person can gain my total loyalty, for as long as God wants. I have friends who are more than 60 years old, since we were in second grade, others, more than 40 years old and the affection is intact.
Recently, I had a dog, but we had to give it up for adoption because it was growing too much, this house is very small, we took it to the house of some friends who take very good care of it, the dog has a big yard to run around and play, I visited these friends after more than a month without going and the dog went crazy when he saw me, I had to hug it so that it could stay calm.
Being a dog means having a good memory, taking care of the people we have around us, being grateful, not being resentful, being vigilant of our children, protecting them when they are puppies and feeding them well, I think I have all that. I'm a bitch in the best sense of the word.
Thank you for your kind reading.
My content is original
I used Google translator.
Images of my own.