Saludos a todos. Con motivo de celebrarse este 10 de octubre el Día Mundial de la Salud, hoy me uno a esta iniciativa tan valiosa que nos propone @holos-lotus titulada: ¿Gozo de una buena salud mental? – Iniciativa. Gracias a mi amiga @belkyscabrera por la invitación, la cual extiendo a mis amigas @rosam10 y @natica83.

La salud mental es un tema que se encuentra hoy en día en el tapete de nuestra cotidianidad. Muchos dirán que no es el tema de salud más importante, ni el que deben abordar a priori, pero qué lejos están de saber que el resto de las enfermedades corporales van de la mano de nuestro estado mental, para bien o para mal. A medida que nuestra mente sana, el cuerpo también, y viceversa, si nuestra mente está enferma, nuestro cuerpo se irá deteriorando paulatinamente con ella.

Desde mi perspectiva docente, he considerado al cuestionario como una de las herramientas más efectivas a la hora de comprender un tema determinado. Por eso siempre me ha gustado el ejercicio de hacerme preguntas y darles respuestas, es una manera más práctica y precisa de analizar y alcanzar la comprensión del tema que estamos trabajando. Una vez que hayamos desglosado cada punto podremos entender mejor el contexto. Por eso me motiva responder este banco de preguntas que nos brinda el equipo Holos & Lotus:

¿Mis pensamientos generalmente, me llevan a estados de bienestar o malestar?

Es un círculo vicioso, porque me lleva a ambos. Puedo iniciar con un pensamiento hermoso que me otorga un bienestar indescriptible, pero lentamente se va alterando hacia las limitaciones que bloquean la posibilidad de que ese pensamiento se haga realidad.

¿Qué hago con las emociones que me bajan la energía como el desasosiego, la impotencia, la culpa o el rencor?

Cuando estas emociones me atrapan, busco la manera de drenar, desahogarme de alguna manera, lloro si es necesario porque el llanto lava el alma y la despeja, se siente alivio y eso es importante y necesario. También suelo hacer cosas que me gustan para liberar esa carga de energías negativas, escribir, salir y dar un paseo, reunirme con gente con muy buena energía que me transmita las mejores vibras, hago yoga porque el estiramiento relaja alma, cuerpo, y mente, salgo a caminar, escucho música, o me doy un buen baño con agua tibia que me relaje por completo.

¿Soy capaz de decir no y poner límites a través de una comunicación asertiva?

Hace un tiempo me costaba hacerlo, sentía que el No era un generador de polémicas ya que había imposición desde las otras partes, pero después de la aceptación de situaciones desagradables venía mi insatisfacción personal ya que aceptar algunas cosas en la vida por hacer sentir bien a los demás por encima de nuestro propio bienestar, es el peor veneno para la salud mental. Un día de esos, no recuerdo cómo ni cuándo, asumí al No como herramienta positiva para hacer respetar mis criterios y decisiones, y puedo asegurar que al principio trajo alborotos, pero hoy en día es mi mejor arma para los que no respetan mi derecho personal, y he podido canalizarlo a través de una sana comunicación.

¿Acepto el desequilibrio como una parte natural del ser, sin embargo, al reconocerlo soy capaz de aplicar estrategias para regresar a él?

Sí, totalmente. Si hay algo que en medio de mi diagnóstico de ansiedad he sabido manejar, es reaccionar a los llamados de alerta de mi mente y de mi cuerpo. Es natural que nos sintamos abrumados por tantas cosas; crisis económica, ausencia de seres queridos, estrés del día a día, pero una vez que sintamos este descontrol, hay que poner un freno, sí, frenar, así como cuando vamos manejando un vehículo y algo nos obliga a pisar el freno y detenernos para no chocar, de esa misma manera sucede con nuestras vidas, al mínimo indicio de desequilibrio, frenamos y evaluamos la situación para hallar soluciones y evitar una caída total.

¿Encuentro satisfacciones en el trabajo que realizo, a tal punto que si lo coloco en una balanza pesa más lo positivo que lo negativo?

Hoy en día, y después de un giro de 360° en mi vida laboral, y en otros ámbitos de mi vida, puedo decir con seguridad que en la balanza pesan más las cosas positivas que las negativas, y eso lo logro a través de un ejercicio mental que nos propuso nuestra amiga Rosa Hidalgo en este mismo espacio, que hoy por hoy no sólo practico en las noches antes de ir a dormir, sino en cualquier momento del día que lo requiera. Se trata de enumerar las cosas buenas de cada día, incluso, mucho más allá también enumero las cosas buenas de mi vida en forma general, y eso me brinda una gran satisfacción.

¿Por lo general mis decisiones son acertadas resolviendo de manera positiva las situaciones que se me presentan?

La mayoría de las veces son acertadas, incluso cuando oriento a los seres queridos, evalúo los pros y los contras de esa decisión para obrar de la mejor manera, pero también he tenido mis desaciertos y me han traído consecuencias que todavía causan efectos incómodos en el presente. Simplemente, ya aprendí a vivir con ellos.

¿Siento que con mi ser y hacer aporto al mundo?

Muchísimo, de eso no tengo ninguna duda y es una de las cosas que me causa más satisfacción, poder ser y estar siempre para otras personas que necesiten de mí en muchos sentidos, sobre todo a los seres que amo.

Es nuestra responsabilidad directa cuidar nuestra mente en la medida de lo posible, para que nuestro cuerpo reciba toda esa buena vibración y canalice la transmisión de energías positivas. Bien dice una frase: Mente sana, cuerpo sano.

Fuente de las imágenes:
Las imágenes pertenecen a mi galería personal
El traductor utilizado es: Deepl Translator