El mundo médico no se aleja mucho del mundo militar en cuanto a jerarquias se trata, y es que cada año que sumas de experiencias en el ambito de los postgrados incluye que subes un escalon que te otorga digamos de alguna manera mayor autoridad. Actualmente yo me encuentro en el segundo escalon, soy residente de segundo nivel. Pero cada año en visperas de Septiembre inica la temida "transición", es cuando te van iniciando a llevar paciente con mayor complejidad y a poco a poco irte asociando tareas que hace un residente de mayor nivel al tuyo, para entrenarte a que puedas mas adelante hacerlo por ti solo y es cuando ya asciendes al siguiente escalon, por que en noviembre - diciembre se realiza la guardia oficial de ascenso, los residentes de tercer nivel se retiran de la parte asistencial y queda el resto solos como todos unos de residente de mayor jerarquia, hasta enero cuando ingresan los nuevos residentes de primer nivel y se reinicia el ciclo.
Sin embargo, durante los meses de transición en el contexto de que los residentes de tercer nivel se encuentran presentando sus trabajos especiales de grado, actividades con motivo de graduación hay algunas guardias experimentales donde nos dejan solitos, y es cuando inicia la verdadera transición, hasta que se oficializa en diciembre. El año pasado para mi fue un poco atipico, porque cuando esta transición ocurrio yo estaba de vacaciones, asi que basicamente llegue cuando todo mundo ya era grande, y bueno tuve que aprender a ser una niña grande con mayores responsabilidades de una manera un poco abrupta y sin entrenamiento previo. Pero este año, no tuve la misma experiencia, y mi primer desafio como futura R3 fue superar las guardias malignas de la semana del congreso, ya que dieron libre todos los dias a los R3 para asistir al congreso nacional de pediatria, mientras nosotros cubriamos los puestos en el hospital.
La verdad si sentia mucho miedo, de que llegara algo realmente grave y no supieramos resolver. No se porque razon uno siempre duda de sus capacidades, el pundo es que vivimos una semana atipica, llena de aventuras nosocomiales, donde me probe a mi misma que puedo con todo, y que era mas el miedo por psicoterror que nos infundieron, que lo que realmente sucedio. Asi que despues de esta semana maligna, puedo decirles que me siento preparada para asumir este nuevo reto, ya en la recta final, de esta aventura nosocomial llamada postgrado, vamos bien encaminados a este nuevo escalon, con el mejor de los animos.
Parte de esta carrera es apreden a ser un buen gerente, aprender a ser un lider, y canalizar tus emociones, creo que fue de las cosas que mas note que se necesita como R3, aprender a dirigir a tu equipo, porque mantener el orden y la calma cuando todo se sale de control en una guardia, es de lo mas dificl, porque no puedes por nada del mundo demostrar que sientes miedo. Pero bueno aqui vamos, paso a paso, aprendiendo cada dia mas de esta bonita profesion. Espero disfrutaran de esta anecdota, nos vemos en la siguiente publicación.
