He aquí algunos de sus muchos beneficios.

Pararse de manos es una postura que tiene muchos beneficios para la salud física y mental. Algunos de estos beneficios son: Tonifica y le brinda fuerza al cuerpo. Al pararse de manos se fortalecen hombros, espalda, brazos y muñecas. Además el pecho se expande y se trabaja el abdomen ya que es necesario mantenerlo contraído para lograr el equilibrio en la postura. Mejora la digestión y se estimula la glándula pituitaria que es la encargada de regular diversas funciones del cuerpo, entre ellas, el metabolismo. Al invertir el cuerpo, se favorece el flujo sanguíneo hacia los órganos internos y se ayuda a eliminar toxinas y residuos. Tranquiliza la mente y reduce el estrés. Pararse de manos ayuda a liberar endorfinas, las hormonas del bienestar, y a calmar el sistema nervioso. También se estimula el cerebro al aumentar el oxígeno y el riego sanguíneo en la cabeza. Proporciona energía y aumenta el autoestima. Pararse de manos es un reto que requiere de confianza, coraje y concentración. Al lograrlo, se siente una sensación de logro y satisfacción personal. Además, se mejora la postura y la alineación corporal. Pararse de manos es una práctica que puede traer muchos beneficios, pero también hay que tener en cuenta los riesgos y las precauciones. Es importante calentar bien antes de hacerla, tener una buena técnica y alineación, y evitarla si se tiene alguna lesión en el cuello, la espalda, los hombros o las muñecas. También se debe consultar con un médico si se tiene alguna condición de salud que pueda contraindicar la inversión, como la presión arterial alta, el glaucoma o el embarazo.