Cuando sobran
hasta las palabras
porque el sonido
se clava hondo...
cual daga afilada
en la matriz profunda
de la misma entraña,
mejor acallar los ecos
y cerrar los ojos al alba,
y esperar otro día...
mejor para la charla.
Las palabras son...
rojas o blancas rosas
y puntiagudas espadas,
que acarician suaves
o perforan el alma...
que provienen
de los arrabales ocultos
donde se tocan las almas.
Dame amplias razones
y nunca vanas palabras;
que aunque no hablen
los mudos corazones,
si sienten cadencias...
que aligeran su causa.
-Ousía Poética Junio 12, 2014