A ti mi fruto, mis esperanzas y mi respirar.
A ti hijo mío que llegaste para hacerme diferente, para hacerme sensible a lo que ni siquiera notaba.
A ti y a tu llanto que me dijo que llegaste, y a mis lágrimas cuando al fín te escuché.
A ese 13 de febrero que amaneció con mi sonrisan y mi amor a flor de piel.
A tu carisma y creatividad, y a la inexplicable manera de meterte cada vez mas en mis venas.
A esa inmensa sonrisa que revive hasta al mar muerto.
A tu energía que triplica la mía, pero que en mi cansancio la sigo.
A tus preguntas y dudas que me hacen ser el mejor de los maestros y hasta el mejor estudiante.
A lo que me enseñas y aprendes
A tus travesuras que destiñen mi cabello
A esa larga carretera que nos separa y a todos los dias en los que no puedo estar junto a tí.
A las lagrimas que caen de mis ojos al pnsar que un día ya no tocaré tu rostro.
A ti hijo mío, mi tiempo y mi vida.