¿Alguna vez han sentido esa emoción enorme al escuchar una canción que les gusta mucho? O al ver la escena que es el clímax de una película. Te preguntas cómo pudo llegar a la mente de su autor o cómo se unieron millones y millones de sinapsis para que alguien llegase a crear ese algo tan maravilloso. Más aún, cuando hablamos de cualquier forma de expresión de arte en los siglos antes de toda la tecnología que existe actualmente y que solo contaban con su imaginación y la inspiración en la naturaleza, las personas y emociones.
"La Sopa", 1865
Es mi posición ante Bouguereau. Automáticamente pienso en su nombre completo al ver una de sus pinturas, quizás porque es la mejor forma de empezar haciéndole honor como se merece, porque su nombre es una de las firmas más importantes de la pintura académica. William Adolphe Bouguereau (1825-1905).
De nacionalidad francesa, nació el 30 denoviembre de 1825 en La Rochelle. Desde su nacimiento perteneció a una familia de la pequeña burguesía y tuvo buena escuela desde temprana edad. Pasados los años, a pesar de la oposición de su padre, Bouguereau consiguió entrar en instituciones de arte y ganar concursos de arte académico, hasta que logra formar parte de la Academia Francesa de Artes (la crème de la crème del arte francés) consagrándose como el pintor más grande de Francia en aquél entonces, según fuentes de la época. Pertenecía a la corriente del Academicismo, y se entiende por éste "la técnica en obras cuando en éstas se observan una serie de normas consideradas "clásicas". Establecidas por una Academia de Artes."
A modo de un ensayo corto, quisiera hablar brevemente sobre su estilo en general y mostrar algunas de sus obras que son mis favoritas sin orden de preferencia en particular.
"Cupido y Psique", 1980
"The Elder Sister", 1869
En su momento y con la llegada del Impresionismo fue fuertemente criticado por seguir cánones de belleza viejos y que "no aportaban nada al arte moderno que se imponía en la época". Esto causó que sus pinturas fueran olvidadas en áticos de museos durante muchos años, hasta la mitad del siglo pasado que se les hizo volver a salir a la luz y se les dio el mérito que merecen.
Representaba como pocos la anatomía humana con tal sublimidad y detalle producto del enorme talento que poseía y las técnicas rigurosas del arte académico, logrando una escena impecable y armónica entre la naturaleza y los desnudos. Los protagonistas en sus pinturas eran mayormente criaturas mitológicas, gente común del pueblo y niños. Borguereau celebraba el amor y la unión. A veces la melancolía.
"El Nacimiento de Venus", 1879.
Bouguereau llegó a Francia en el momento más impreciso, ya que era una época en la cual Europa explotó una ola artística inclinada hacia lo moderno, el Impresionismo y Modernismo. Entonces, el hecho de que representara continuamente a personajes de obras épicas del siglo XIV, personajes bíblicos y seres mitológicos con tanta meticulosidad y tecnicismo (después de todo, de esto se trataba el Academicismo) le ponía en una posición anticuada ante sus colegas en aquella época.
"Dante y Virgilio en el Infierno", 1850.
"Dante y Virgilio en el Infierno" fue, quizás, una de sus obras más innovadoras en cuanto a su propio estilo, pues aquí no vemos el ambiente representativo tan apacible en la mayoría de su trabajo sino que vemos brutalidad y emociones más hostiles. Muestra la llegada de Dante junto a Virgilio en el octavo círculo del infierno, acto que se narra en "La Divina Comedia" de Dante Alighieri.
"Una Joven Defendiéndose de Eros", 1880
Su estilo es reconocible de inmediato una vez que llevas un tiempo apreciándolo. Se le atribuyen aproximadamente 800 pinturas y se puede apostar a que todas y cada una cuenta con el arduo trabajo en su realización de punta a punta, lo cual lo convierte en uno de los más grandes genios en la historia del arte.
Aquí podrán ver un poco más de su trabajo:
https://artsandculture.google.com/entity/m023q21
¡Espero que les haya gustado el post y gracias por leer!