Señores, ha llegado la hora.
Todo aquel que este en el mundo de las criptomonedas, está siendo pionero en la revolución que está por encaminarse. Se terminaron los días de contar los billetes para el atado de cigarrillos o donde una latita de atún escondida en el refrigerador, era la razón de alegrarnos la noche…
Llámenlo premonición, intuición o el solo hecho de ser soñador.
Llegará el día que Ethereum, Litcoin, Monero u otra de las grandes criptos valdrán miles de dólares y nosotros, precursores de esta historia, lo veremos en directo desde nuestro jet privado o en aquel yate que compramos con décimas de Bitcoin…
Seremos mirados como aquellos atrevidos que se animaron a lo impensado, que compraban algo que supuestamente no tenía valor. Seremos recordados como esos que creyeron y trabajaron día a día por la prosperidad del blockchain.
Señoras, señores…
Les recomiendo ir redactando la carta de renuncia a sus respectivos trabajos. Por ahora no tomen una decisión precipitada, guárdenla en la mesita de luz, siempre preparada para lograr su objetivo y por ahí, de vez en cuando, léanla para que no pierdan el sentir:
Estimado, le escribo para informarle sobre mi renuncia, dado que he sido un visionario. Le agradezco por la oportunidad de desarrollarme en lo profesional, pero a mis jóvenes 30/40 años he tomado la decisión de retirarme para disfrutar de mi familia y de la vida.
Y como si eso fuese poco...
Tengo la posibilidad de ir plasmando estos escritos, para mis futuras generaciones, las cuales podrán entender la era que marcamos. Donde los banqueros perderán su gran negocio y tendrán que adaptarse, a lo que nuestra querida blockchain viene a imponer.
Siempre he sido de la idea, de que el dinero no compra la felicidad, ni cerca está. Aunque tengo que reconocer, que en este mundo que vivimos, totalmente inmerso en un consumo que nos lleva puestos como estampida de búfalos, brinda tranquilidad.
Desde el lugar del mundo que se encuentren, sepan que estamos siendo testigos de un antes y un después.
Todavía hay muchos, que si leyeran este escrito, no tendrían ni la más mínima idea de lo que escribo, pero dentro de 3, 5 o 10 años, lamentaran el no haber tenido la oportunidad de abrir los ojos, enfrentar los miedos a algo nuevo y haber sido participes de una nueva revolución mundial.
Soñar es gratis amigos y este sueño no es difícil de cumplir.
Mucho de lo escrito acá, es verdad. Y tenemos que tener la capacidad, para aprovechar todas las oportunidades que se presenten. Estén atentos, que un simple movimiento puede ser el autor del éxito o de un completo fracaso. Hasta el día de hoy, leo personas que vendió miles de Bitcoin a $4. Por esto, confiemos en la información que poseemos y creamos en nosotros.
Y más allá de que esto pueda cumplirse o no, día a día, minuto a minuto… Esta idea va tomando fuerza y ojalá, en un futuro cercano pueda releer este texto y reírme de que tuve razón…