Debajo de mí está el mar.
El que una vez se perdió.
Ni luz ni calor
O de nuevo... así que, por cierto mañana.
Nutre el corazón,
A los gritos de la multitud diabólica.
Me está esperando todas las mañanas "hola"
Tus toques, sonrisa, lengua.
Debajo de mí está el mar.
El que una vez se perdió.
Ni luz ni calor
O de nuevo... así que, por cierto mañana.
Nutre el corazón,
A los gritos de la multitud diabólica.
Me está esperando todas las mañanas "hola"
Tus toques, sonrisa, lengua.