Poema a un exalumno.

Poema a un exalumno.

Cuando dentro de un tiempo mires mi rostro viejo,
cansado y arrugado por el tiempo indolente,
no pienses que es mi culpa ni de ninguna gente
lo que le ha sucedido al personal espejo.

Solo guarda silencio de manera prudente
y veme con ternura, satisfacción y orgullo,
diciendo estar contento de ese maestro tuyo
que te brindó enseñanza para ser excelente.

Quiero que tu recuerdo se vuelva tierno arrullo
contándoles a todos tu agradable experiencia
en cuanto a las materias de humanidad o ciencia,
e intenta en lo posible que no sea un murmullo.

Ya cuando pase el tiempo y acabe mi presencia,
tú andarás por la vida dando conocimiento,
y a la ley del Señor le darás cumplimiento
al pasarte lo mismo que a mí en esta existencia.