Relato Perdido - La vida desastrosa de Iván Vol. 2

Y ahí estaba yo, entrando a la trampa de ratones, sin chistar. La verdad, mi decisión se tomó por una ligera casualidad que ocurrió en el momento que ella se sentó a mi lado; resulta que en ese instante llegaron dos notificaciones a mi celular, seguidas, iluminé la pantalla de mi móvil y vi que había hecho un Match en el Tinder con una mujer, cuyo nombre era el mismo nombre de ella; la otra notificación era un WhatsApp de un chush que hace mucho no me hablaba, cuyo nombre también era el de aquella mujer. En ese momento recordé una cita de uno de mis libros de vida, del autor Milan Kundera, "La Insoportable Levedad del Ser", la cual traigo a relación. Esta pequeña cita me hizo firmar un pacto que en ese momento era tan emocionante y agradable, pero que luego me iba a cobrar el hecho de arriesgar tanto:

“No es la necesidad, sino la casualidad, la que está llena de encantos. Si el amor debe ser inolvidable, las casualidades deben volar hacia él desde el primer momento, como pájaros hacia los hombros de San Francisco de Asís.”


Me pareció bonito que hubiera una casualidad entre los dos, por supuesto no iba a contarle aquel percance, me tomaría por loco, solo le sonreí y continué mi cortejo hacia ella, esta vez con más fuerza, quería que estuviera conmigo a como diera lugar, imaginé regalarle el libro como un guiño de la vida por nuestra historia. Hay que notar que ella no había hecho absolutamente nada para ganarse esas ganas de cortejarla y ese libro. Piensen en ello un momento.

Resulta que toda nuestra historia estuvo marcada por unas pequeñas alarmas que me decían lo trágico del desenlace, alarmas que uno pasa desapercibidas, porque uno quiere llegar al objetivo de cualquier forma. Les voy a contar la primera de toda nuestra historia.

Mientras hablábamos, un amigo la sacó a bailar, se que le tenia ganas, por la forma en que la miraba, sin importar que la novia estuviera presente, odiaba eso en un hombre, pero a ella le hacia gracia todo aquello, es más, copiaba su cortejo, más que el mío, era increíble ver como ella lo miraba fijamente, mientras él le insinuaba cosas, solo reía de forma picaresca. Si no es por la novia del paciente, estoy seguro que no hubiera sido el ganador esa noche. Ahora que lo veo tan claro, al no tenerla en mis manos y al no poderle escribir, recuerdo esas alarmas tan obvias, el hecho que para ella todos éramos un juego, no importaba el jugador y que yo estuviera tan seguro de mis capacidades, que omití mi experiencia entera. Craso error, mi ego empezó a actuar y no creía que no había nada imposible para mi.

Para disipar el percance de mi amigo, me fui a charlar con otra amiga que estaba cerca, también era hermosa, me gustaba mucho esa mujer, por supuesto era novia de un amigo y mi código no me permitía hacerle nada, ni un suceso de fina coquetería, ni una insinuación, solo podría hablar con ella de forma familiar y amigable. En el momento que me acerco, veo que está enojada y un poco mareada por el licor.

– ¿Por qué me dice él esas cosas? – no sabía de que hablaba, solo hago un gesto de confusión y preguntó…
– ¿Quién?
– Mi novio. No se que le pasa, es un niño, un inmaduro.
– Hey, no digas esas cosas que son palabras pesadas – Noto a su novio más adelante con los brazos cruzados y bastante molesto.
– Si, no se porque no me deja disfrutar del momento.
– Pero cálmate, porque no vas y arreglas las cosas, no puedes quedar así con él esta noche.
– No me quiero ir y él sí.
– ve y habla con él, yo se que todo se arreglará…

En ese momento recibí unas manos suavemente por mi pecho, no niego que me excitaron, por la suavidad como entraron en mi, era ella otra vez, miré hacia atrás y era un cuadro patético, el amigo que le estaba cortejando estaba peleando con la novia también, yo solo pensaba.

– Maldito licor, ¿por qué actúas con la gente de esa manera?, qué le pasa a ella, ¿no es suficiente conmigo? ¿Solo alimenta su ego? O ¿Le interesa realmente el cabeza de papa ese?.

Ella solo me miraba de manera picaresca, como si nada hubiera ocurrido, como si no me hubiera dado cuenta de su picardía con el otro, me sentí un poco disgustado, mi amigo se había convertido en el cabeza de papa ese. Y yo, yo no quería que se viera toda la escena como si mi alma fuera la segunda opción. Pero lastimosamente lo era…

separador2.png

Espero hayan disfrutado de mi post, si quieren leer más historias como estas, síganme, ademas, les estaré compartiendo más de mis aventuras y relatos, visitaremos los lugares más bellos del Valle del Cauca y Colombia, si les gustó apoyen con sus Upvote y Reesteem. Estaré respondiendo a sus comentarios...



separador2.png


Imágenes tomadas por el usuario @ivar1aldana con iPhone 7









H2
H3
H4
3 columns
2 columns
1 column
Join the conversation now