Qué dolor tan grande siento cuando con mis ojos veo como gente de mi tierra muere de hambre y desespero. Como niños tan pequeños se pasean desnutridos cuando políticos incompetentes juegan a ser escogidos.
Empiezo la rutina. Salgo de casa con premura y de inmediato me doy cuenta que una familia busca su desayuno en la basura; Me asalta la tristeza y trato de no pensar en tal desgracia, pero la verdad es que todo empeora cuando voy a la farmacia.
Pues no hay medicinas ni para curar una simple infección así que ruego a Dios para que ningún día mi familia o yo estemos en esa condición. ¡Ay que mala situación! Es imposible no preocuparse porque cada día que pasa es más duro levantarse.
Hay que trabajar, eso es lo que dicen. Pero con todo lo que se trabaja aquí no nos alcanza pa' cada quince. Ya no se que hacer, siento que estamos en un hueco ¿será que debo dejarlo todo y largarme al aereopuerto?
Yo no se qué es esto. Quiero volver al pasado y que mi familia y mis amigos no se vayan de mi lado. Que los niños sean felices y que coman demasiado para que crezcan sanos y puedan construir el futuro que más deseamos.
*Fotografía de autoría propia
Todo esto que te escribo no es un cuento, es la pura realidad de un pueblo que está sufriendo. Solo espero lo mejor, ya no hay nada que decir. No perderé la esperanza, de esto vamos a surgir.
