El capitalismo latinoamericano después del saqueo y el neoliberalismo en la década de los noventa.

Es importante hacer una introducción pasando revista a las principales transformaciones que tuvieron lugar en los países de la región en esos años y que demuestran categóricamente la naturaleza predatoria y genocida del capitalismo al l evar a la práctica una verdadera"eutanasia" de los pobres.

Es conveniente incorporar una introducción pasando revista a las principales transformaciones que tuvieron lugar en los países de la región en esos años y que demuestran categóricamente la naturaleza predatoria y genocida del capitalismo al llevar a la práctica una verdadera"eutanasia" de los pobres.


Fuente de la imagen

La Inglaterra victoriana.

Marx decía que para analizar rigurosamente este modo de producción era preciso estudiarlo allí donde se presentaba en su más prístina expresión. Si a mediados del siglo XIX este lugar era la Inglaterra victoriana, hacia finales del siglo XX, y habida cuenta del proceso de creciente barbarización del capitalismo, este lugar es precisamente la América Latina.

Ante la imposibilidad estructural de resolver sus propias contradicciones y la frustración resultante del primer ciclo de las revoluciones socialistas abierto en octubre de 1917 en Rusia, el capitalismo comenzó a deslizarse por una pendiente civilizatoria sin retorno en la cual los horrores del ayer asumen ribetes monstruosos al día siguiente. La carnicería de la Primera Guerra Mundial se transformó en una anécdota marginal cuando la vanguardia del capitalismo internacional y del llamado "mundo libre" decidió arrojar dos bombas atómicas sobre sendas ciudades japonesas indefensas.

Las atrocidades del Vietnam.

Las batallas del Marne y de Stalingrado empalidecen ante las atrocidades de todo tipo cometidas en Vietnam, de la misma manera que los viejos déspotas de la derecha se transforman en inofensivos cascarrabias cuando se los compara con Hitler, Mussolini, Franco y toda la galería de tiranos que las "fuerzas del mercado" impusieron a sangre y fuego en América Latina en la segunda mitad del siglo XX.

Nuestra región se convirtió, con la degeneración de la sociedad burguesa, en banco de pruebas y prototipo de cruentos experimentos de reestructuración capitalista que luego se ensayarían en otras partes.

El fundamentalismo de mercado.

El fundamentalismo de mercado se puso a prueba primero en el Chile de Pinochet en 1973 –con la inicial bendición del posteriormente arrepentido Milton Friedman– para seguir luego en la Argentina del terrorismo de estado y extenderse posteriormente por toda nuestra dilatada geografía.

Años después, una versión atenuada en sus formas se impondría en la Inglaterra de Margaret Thatcher, en los Estados Unidos de Ronald Reagan y en el resto de los capitalismos desarrollados.

Claro está que el neoliberalismo tropezó en estas latitudes con resistencias más eficaces que las que se levantaron heroicamente en América Latina, en donde el salvajismo con que se impusieron las recetas del Consenso de Washington no encontró parangón con otras partes del planeta.

Un freno a la voracidad destructiva de los mercados.

Aquí el capitalismo adquirió, especialmente en las experiencias de la Argentina de Menem, el México de Salinas de Gortari y sus sucesores, el Chile de Pinochet y sus continuadores, el Perú de Fujimori y el Ecuador de Febres Cordero, rasgos caricaturescos por momentos tragicómicos que hoy, a comienzos del siglo XXI, ejemplifican de manera insuperable las características fundamentales de un régimen de producción que en el mundo más desarrollado aparecen desdibujados por los avances democráticos y la consistencia de una ciudadanía que impone frenos a la voracidad destructiva de los mercados.

En nuestro continente, en cambio, la cortedad de los primeros y la liviandad de la segunda hizo que la recomposición capitalista de las últimas dos décadas asumiera rasgos de inigualable nitidez y dejara al desnudo, sin ninguna clase de mediaciones, la naturaleza injusta, opresiva, destructiva y, en el fondo, suicida de un modo de producción y toda una entera civilización que se levanta sobre sus hombros y en la cual las cuestiones fundamentales de la vida social son reducidas a un mero cálculo de costos y precios.

steemit-images-footer-español.png

Weblinks:

Facebook
Instagram
Pinterest
Twitter

H2
H3
H4
3 columns
2 columns
1 column
Join the conversation now
Logo
Center