Hola a todos, éste es un texto que escribí hace poco tiempo, espero les guste tanto como a mí.
En aquellas intempestivas noches en que el mundo onírico se presentaba ante mis ojos ignorantes de la realidad, te encontré mientras todo me era extraño, y en aquella extrañeza encontré amor donde creí que jamás volvería.
Y tú rodeaste mi cuerpo con la misma rareza con la que alguna vez lo hiciste, en aquel momento supe que no quería saber nada más de lo que pasaba, ni de lo que pasaría después. Un beso húmedo tocó mi mejilla mientras mi mano se aproximaba para tocar mi rostro.
Aquel lugar ya no era un mundo extraño, se había convertido en una plaza llena de los cerezos que tanto nos gustaban a ambos, aquella plaza me era indiferente frente a tus ojos, siempre brillantes y melancólicos, aquellos que alguna vez fueron el origen de decenas de poemas que jamás guardé, de aquellas letras perdidas que tú quizá en alguna parte de la existencia aún conservas.
Tus labios se movieron y formaron la frase: “te extraño” mientras tomabas mi mano incrédula de lo que estaba pasando, y enredabas tus dedos con los míos.
Y el mundo comenzó a deshacerse, un timbre estridente y repetitivo te alejaba de mis brazos, te movía hasta un lugar al que espero alguna vez llegar para decir al fin: “te extrañe” y fundirme en un abrazo infinito contigo, para no volver a soltarte, para no volver a sufrir, para volver a sentir calor en mí.
Eso es todo por este post, espero haya sido de su agrado. Buen día/tarde/noche.