Generalmente conocemos a los Elefantes por su memoria, donde pueden recordar los lugares y a otros animales que vieron hace algunos años, incluso hace décadas atrás
Tienen un cerebro privilegiado que les permite sentir y expresar una serie de emociones complejas, entre ellas el amor.
Los Elefantes muestran sentimientos, y para ellos no hay un amor más grande que el amor de una madre por su hijo, desarrollan el lazo más fuerte del mundo con su Cría, que se extiende más allá del tiempo de crianza y que puede durar toda su vida, esta capacidad de formar lazos, casi a perpetuidad, los hace capaces de sentir amor y desamor, o dolor, cuando un ser querido es separado del resto
Los elefantes, entierran a quienes ya murieron y, cuando la manada vuelve a pasar por la “tumba” de un viejo integrante, se detienen a recordarlo. Para ellos, la muerte es algo serio y les afecta mucho