La ignorancia es terca, cizañosa y como dicenn en mi pueblo, embelequera. No la invites, ella igual llega, algunas veces vestida de inocencia, otras veces con traje de maldad, pocas veces se disfraza de sabiduría, pero igual es la misma realidad.
La ignorancia es terca, cizañosa y como dicenn en mi pueblo, embelequera. No la invites, ella igual llega, algunas veces vestida de inocencia, otras veces con traje de maldad, pocas veces se disfraza de sabiduría, pero igual es la misma realidad.