La noche del fin del mundo - Parte 1

Proemio

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Prípiat, foto de David Schindler

Si no recuerdo mal hace ya dos años cuando Iker Jiménez relató un suceso acontecido en el año en que muchos de vosotros probasteis por primera vez una teta. El 26 de abril de aquel año sucedió lo que Iker llamó “La noche del fin del mundo”. 24 otoños más tarde, “la guadaña invisible de la muerte” se convirtió en “la guadaña visible de la muerte”. La situación que vivimos tiene semejanzas con aquel acontecimiento: la noche reinaba, sucedió en el extranjero, la vida corría peligro, … Pero también tiene claras diferencias. Cuando la amenaza no puedes verla, no puedes olerla, no puedes oírla,… no puedes sentirla y por tanto no puedes tener miedo de ella. Esta vez era distinto, estaba allí y podías verla, sentirla y olerla.

Se dice, sin fundamento ninguno, que los lugares más peligrosos del mundo están en los cajeros de Errenteria. Lo cierto es que hay países típicamente peligrosos. Uno de ellos es Venezuela. Dani ha vivido allí muchos años y es consciente de todo lo que allí sucede.

Pedro Piqueras describiría situaciones de muerte, dolor, secuestros, robos, droga, imágenes espeluznantes, atracos, sangre, … Sin embargo Dani nunca ha pasado tanto miedo en su vida como minutos antes de aquel amanecer. De hecho, ni él ni el resto de los que allí estábamos: mi primo y yo.

Me atrevería a decir que ni Jon Sistiaga se atrevería a meterse en una situación la mitad de peligrosa.

Todo sucedió durante el último aniversario del día de la revolución, en la ciudad donde más aquincenses sobreviven.

Continuará…

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