Diario de confinamiento 22042020

No, la historia no acaba ahí, vamos que salir, es casi de lo menos. ¿Habéis probado a subir en un ascensor, tocando lo menos posible con el flexo calentando la cabeza y la mascarilla como freno a la respiración ya descompasada por el esfuerzo y el miedo? Pues eso, no sé lo que tarda, pero angustioso. Abres la puerta con un golpe de cintura, sales de espalda, buscas nervioso la llave en el bolsillo con la mano rígida y lívida por el esfuerzo,cuesta doblar los dedos no digo ya, meterla en la cerradura, abres, respiras, dejas la bombona en la entrada. Respiras de nuevo, piensas, intentas no perder la concentración mientras hiperventilas y te intentas acostumbrar al cambio de luz natural a la luz de la casa.

Primero el bote de hidrogel, las manos, hasta casi medio antebrazo, entonces sí, le das al interruptor, después las chanclas, fuera, pegadas a la puerta, delimitando los pasos y el espacio, coges la fregona, el palo resbala un poco del aloe vera del hidrogel, vas marcando las baldosas, al menos unas cuantas con el agua, con un buen chorro de lejía, hace al menos quince días que me pasé a la lejía pura, total, para que tanto detergente y perfumes.

Mojas los pies, resbalando sigues el camino, de baldosas, que no son amarillas, hacia el baño, la pastilla de jabón, el agua, de nuevo hasta medio antebrazo, la toalla,listo, ya me puedo quitar la mascarilla. Ahora toca, las llaves, las monedas, la cartera, una bayeta, el spray preparado de agua con lejía, sí más y más lejía, limpio minuciosamente, luego va a una cajita habilitada, si en la entrada, primera fase, terminada.

En el baño, la ducha, consta de dos fases, una con jabón de marsella, sí el de la ropa, el que se usaba en las pilas, el de toda la vida, abundante espuma, hasta que me reflejo entre el vaho del agua a la máxima temperatura que soporto, como una suerte de fantasmal y jabonoso sujeto. Aclarar, respirar, ahora viene la segunda parte, el gel normal, con esponja, ya no hace falta ser tan minucioso, si me demoro, es porque se que precede a la ducha fría, dicen que va bien para estimular la grasa parda, el sistema inmunológico, en fin esas cosas.

Me seco con cuidado de no rozar la ropa "contaminada" por la salida en el suelo, luego uso la misma toalla para recoger la ropa, la toalla de mano e introducirla en la lavadora, lavado normal cuarenta grados de temperatura, como una suerte de tautología que acompaña, cualquier contacto fuera de las paredes de lo que es mi casa....

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