¡Hola otra vez amigos míos!
En esta oportunidad, voy a compartir otra foto con ustedes, igual de importante que las anteriores y con un valor sentimental grandísimo. Fue tomada en abril del 2015, tenía 17 años y estaba pasando por un momento difícil conmigo misma.
Durante mi adolescencia sufrí de sobrepeso, tal vez no pasaba de unos 10kg de "más", pero fue algo muy difícil de llevar puesto que siempre me sentí juzgada tanto por mis conocidos como por mi propia familia. Todo esto produjo en mi problemas de autoestima y ansiedad; no me gustaba tomarme (o que me tomaran fotos), sentía que nada me quedaba bien y hasta por respirar haría el ridículo.
Lo que veo hermoso de esta foto es que como en la mayoría de las fotos que me toman (no se me da muy bien lo de posar) salgo desprevenida, haciendo cualquier tontería; recuerdo que me reía porque me sentía muy tonta posando para fotos en las que sabía que no iba a salir bien y comencé a hacerlo como chiste junto a mi mejor amiga.
Esta foto me hace sentir orgullosa, porque cuando me olvidé de los prejuicios, del qué diran, de cómo me veía, me descubrí siendo hermosa; como dicen "la belleza radica en la simpleza de las cosas".
Espero que estén disfrutando tanto como yo cada una de las fotos que comparto con ustedes mientras les cuento un poco de mi historia.
¡Hasta el próximo post!