En ningún lugar como en el cristianismo, la obra de arte como tal, demuestra ser de modo patente lo que es siempre y en todas partes - obscenidad.
Jacques Lacan
Imagen: Santo entierro, Caravaggio / Fuente
En ningún lugar como en el cristianismo, la obra de arte como tal, demuestra ser de modo patente lo que es siempre y en todas partes - obscenidad.
Imagen: Santo entierro, Caravaggio / Fuente