Marimar

Marimar
Comenzaba el año 2020, mi esposo regresaba de Zaraza – Edo Guárico en Venezuela, cuando me sorprende con un regalo que me envió su abuela, la Sra. Carmen a quién nunca conocí, pero que por referencias de mi esposo fue una gran persona, mi regalo? una pequeña morrocoya de 5 años, a partir de ese momento comenzó la empresa de cuidarla y aprender a convivir con ella y para ella.
Lo primero que hice fue publicar en el grupo de Whatsapp de la familia la noticia y las fotos, pidiéndoles que me ayudaran a ponerle nombre, porque en la familia todos los miembros tienen nombre propio y así pasó de ser una morrocoyita más a ser Marimar.
image.png
A Marimar le encanta estar a los pies de los integrantes de mi casa, pareciera que no le agrada la soledad y sale de sus escondites a participar de las reuniones familiares, se sube a nuestros pies, los baja, los rodea y hasta los muerde –suavemente-.
Camina muchísimo durante todo el día y en varias oportunidades ha quedado con las patitas hacia arriba tratando de voltearse nuevamente, gracias a Dios y que casi siempre está acompañada y logramos voltearla a tiempo (las tortugas/morrocoy tienden a asfixiarse si pasan tiempo prolongado con el caparazón contra el piso).
A pesar de estar en un ambiente quizás poco adecuado para ella, ya que vivimos en una casa sin patio en la Ciudad de Caracas, se ha adaptado bastante bien, cuenta con un espacio grande en donde puede caminar, sin correr el riesgo de que se pierda en la casa o quede volteada.
Para una persona como yo, que jamás había tenido la responsabilidad de cuidar a un animalito, cada día se convirtió en un aprendizaje, a pesar de que el morrocoy/tortuga no interactúa de la misma forma que lo hacen nuestro amigos peludos, tienen una manera particular de hacerse entender, hoy en día, después de 2 años, ya sé que cuando camina en círculos sin cesar quiere comer y que prefiere que le alimenté en las mañanas muy temprano, le gusta un baño con agua templada cada dos días o más.
Entre los alimentos que prefiere están: Tomate, Lechoza, Perejil, Cilantro, Plátano, Auyama, Calabazin, Pepino, pero principalmente le encanta el pollo –al vapor por supuesto-.
Hoy en día, puedo asegurarles que tener una mascota es vivir cada día una aventura, es aprender a convivir, a darle un espacio físico y moral en la vida de la familia y sobre todo volcar todo el amor en un ser vivo que lo necesita.
AMO A MIS MASCOTAS!!!

image.png

H2
H3
H4
3 columns
2 columns
1 column
Join the conversation now
Logo
Center