Obsesión Homicida;;

La noche de aquel primer día de octubre se dice que fue muy fría, helada para ser exactos.

Los pobres morían de hipotermia en las calles y las casas estaban empañadas de aliento blanco. Los copos de nieve bailaban con gracia a través de las calles y la capa blanca que cubría al mundo hacía que todo se viera elegante, casi muerto.

Se dice que aquella noche de octubre, en un hotel ubicado en la avenida principal de la ciudad tras un montón de lujos y dinero sucio se escondía una de las peores atrocidades del mundo. Un pecado jamás antes visto por el hombre.

Había una chica, los que la conocieron la describían como un felino a punto de cazar su presa pero con el encanto que solo un ángel caído poseía, una sólida pared brillaba en sus ojos ocultando el mayor horror que pudo haber cometido. De pequeña todos sus caprichos habían sido cubiertos por el dinero de sus padres, demostrándole que ella era la reina del mundo y si la reina quería algo en sus manos debería observarlo.

El único límite en el mundo para ella era el cielo e incluso si deseaba podía tenerlo. Pero había un algo que se resistía, un algo que no la dejaba dormir por las noches y que la había hecho cometer cualquier acto con tal de obtenerlo.

El hombre perfecto.

Los hombres habían desfilado frente a ella, habían acariciado su cabello y besado sus pies, pero ella necesitaba algo real, un chico que fuera a su imagen y semejanza con el cual compartir una vida entera y tener el futuro que había pintado con colores vivos en su mente. Nada de errores, nada de equivocaciones. Un día cansada de esperar decidió buscarlo ella misma, crearlo para ser exactos. Tomó el cuchillo más grande que poseían en su cocina y salió de su hogar con la promesa a la luna de que la única manera de volver era de la mano de su chico, junto a esa persona que pudiera ser lo suficiente para ella.

Cada chico tenía algo distinto que para ella le parecía indicado así que cortó y cosió cada parte hasta casi completar su obra maestra, su chico perfecto jamás soñado.

Lo escondió en el hotel de la ciudad y descansó con él, pero el olor viajó por el suelo e hizo un gran escándalo en los pasillos haciéndose notar entre los vecinos y produciendo una visita inesperada de los hombres de azul. En las calles se dice que la chica de cabellos negros solo se encogió de hombros antes de sonreír mientras le brindaba suaves caricias a su creación.

Pero nadie lo sabría a ciencia cierta, nadie había revelado que había sucedido en aquel cuarto en realidad.

Lo que sí se puede comprobar fue como unos segundos después de haber entrado los policías un disparo retumbó en el lugar; los testigos que cuchicheaban en las puertas de sus habitaciones testificaron que cuando sacaron su cuerpo fue inevitable no sentir escalofríos al mirar sus ojos muertos mirando el más allá y la promesa en sus labios violetas. Los policías retiraron el cuerpo pero jamás pudieron encontrar la creación.

Meses después, bajo el silencio de las autoridades sobre el tema, las leyendas y mitos comenzaron a deslizarse por las calles creando murmullos, susurrando que si te acercas al hotel, el cual tuvo que cerrar debido a la mala fama que aduirió, podrás escuchar su risa a través de la oscuridad y su creación podrás admirar. Pero hay que tener precaución porque si posees la pieza que tanto anhela contigo se encaprichará y de ella jamás te librarás.

No hasta que seas parte de su perfecta creación.

MORETONES.png

¡Hola, queridos lectores! Lo que acaban de leer es el prefacio de mi historia original "Obsesión Homicida", la cual se encuentra en proceso de creación. Estaré subiendo capitulos y fragmentos de vez en cuando.

Toda opinion y critica constructiva será bienvenida, muchas gracias por leer.

"Bienvenidos a los jardines en forma de laberintos que conforman mi mente, donde las nubes se suicidan, las rosas están pintadas con sangre y las margaritas coquetean con los monstruos en las esquinas más oscuras mientras canciones de cuna se reproducen por los parlantes, ¿Tienes miedo?"

H2
H3
H4
3 columns
2 columns
1 column
Join the conversation now