La estafa de la Motivación.

Posiblemente esté pecando de Cínico Nihilista, pero si hay algo que me molesta muchísimo son los libros motivacionales, sumado con la Onda de los Coaches de toda clase, sinceramente me da nauseas. No quiero sonar fatalista y quitarle la magia al mundo, es simplemente que desde mi punto de vista es una mera estafa.

Juegan con nuestra soledad y la sensación de apatía, juegan con nosotros, dulcificando las palabras, que sí, que pueden servir como un bálsamo paliativo a una herida abierta, pero ninguno de los que hubiese leído habla con la verdad, o por lo menos lo que yo creo que es la verdad, desde mi educación, crianza, pirámide de valores y la forma que con los años he conseguido visionar al mundo no se parece en nada a los que estos Autores dicen.


Fuente

Pídelo, Pídelo con fuerza y el universo te lo dará.

Concretamente me refiero al "El Secreto", a la psicología positiva y toda esa clases de libros o coach que nos venden un método infalible para conseguir cualquier cosa y en el caso de fallar no es culpa del método, somos nosotros los culpables porque el método es infalible. Creo que son muchos los factores por los cuales esta pseudociencia a calado muchísimo en nuestra sociedad, y se que ha calado ya que esta opinión me la reservo en la mayoría de los círculos, por ser muy mal vista, poco comprendida o simplemente no tengo razón.

Analizando muy poco esta psicología que afirma que si deseas algo con fuerza va ocurrir nos encontramos con un gran problema, y es que solemos pensar que la fórmula transcurre en un solo sentido, y es hacia las cosas buenas, pero suponiendo que esta afirmación es verdad, entonces las cosas malas como erupciones, terremotos, el comunismo son también producto de nuestro deseo, es decir somos co-responsables.

Hay cosas que simplemente escapan de nuestras manos, o como le gusta a los coachs decir "área de influencia", pero sigamos analizando esta nueva onda de la motivación. Creo que existe personas en los cuales me incluyo, que no están contentas con su situación, que no encuentran una forma de cambiar, de alterar cual mago la realidad, por ejemplo, a mi me hubiera gustado salir a la calle el dia de ayer y conseguir 1 millón de bitcoin, pero no es algo que va a pasar, por más fuerte que lo desee.

Yo hace algun tiempo atras me creí todo este cuento, pero con el pasar de los años me di cuenta que no, que es pura maraña y verborrea. No se que habra pasado en mi vida para que cambiara de parecer, posiblemente darme cuenta que el mundo es como es y ya, que no hay nada más que sobrepase las barreras de la mente, que somos quienes nos hacemos y listo se acaba la historia.

Es aquí donde me paro y aunque posiblemente suene a eso que critico, tenemos que estar conscientes de que nuestras acciones, no nuestros más profundos anhelos son los que hacen que las cosas pasen, no el universo, y no hay nada mágico detras. Hay una profunda crisis en nuestra época en cuanto a lo gris y avasallante que puede verse y es la realidad, es difícil mantener una sonrisa genuina al ver el mundo tal cual es y darse cuenta que sin querer somos parte de esa eterna rueda.

La eterna búsqueda de aquella herramienta o método para conseguir la eterna felicidad, para lograr aquel millón de bitcoins que nos solucione la vida es tan seductora que nos atrapa y nos envuelve a todos o aun gran número de incautos, que pensamos que estar motivados, que sonreir pese a las circunstancias y cerrar los ojos con fuerza deseando lo imposible hará que sea posible.

Porque esa idea nos consuela y hace que la realidad sea más vivible y aún más cuando las circunstancias no lo parecen, por ello posiblemente aquello hubiese calado tanto, porque funciona tal cual una pastilla contra el dolor, cuando estas pasando por una momento de dificultad nos escondemos en la cueva con estos libros, coachs, audios y etc. Que son como nuestra droga, que nos afirman que este momento es una especie de prueba para determinar nuestra valía, que vendrán cosas mejor, y aquella esperanza sin duda es adictiva. Creerse con fuerza que hay luz al final del túnel nos hace pararnos y seguir caminando hasta que las situaciones cambian y la realidad se ajusta.

Eso no quiere decir que aquellos libros hubiesen tenido razón o no, pero siendo objetivos no la tienen. Pero mientras ayuden a alguien a tener esperanzas al ver una posible realidad al final del túnel le puede dar el beneficio de la duda, sin embargo el problema que tengo con esto son las expectativas falsas que pueden llegar a crearse.

Por ejemplo, supongamos que yo tengo mi portafolio de ShitsCoins y deseo, pido al universo que al menos una de esas ShitsCoins valga no se, 100$. Es posible que pase, pero no porque yo lo haya deseado, pero en la misma medida que es posible, y elevandolo a la enésima potencia es posible que NO PASE NADA. Entonces tomando el escenario más probable, en el que nada pasa, al verme que nada de lo que he aplicado, ni pedido se ha cumplido, voy a sentir frustración, y terminaré desvalido. Mucho peor que como me encontraba antes seguramente.

Mientras que cuando aceptamos la realidad tal como es, aquella sensación desaparece, somos más cautos, y precavidos, nos hacemos más inteligentes y objetivos. Al darnos cuenta que nuestro pensamiento es solo eso, un pensamiento y no tiene ningún poder mágico que logre influir en el universo y en la realidad, nos podemos sentir un poco abrumados al principio, pero inmediatamente por lo menos a mi me pasó, que al llegar a aquella conclusión me di cuenta que si quería algo debía tomarlo, y que algunas veces más que desearlo, es mantener el enfoque, estudiar, aprender y tratar de minimizar los errores, y es así como se logran las cosas.

"Si quieres que algo se muera, dejalo quieto."


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