Hoy les vengo a contar la historia de un principe que aรบn no encontraba su castillo, como el sapo en espera del beso. Asรญ es la historia de Pinkie, este siamรฉs angora que he adoptado hace unos dรญas.
Estaba yo, desde el piso 6 del edificio donde vivo mirando a la nada, cuando veo a este pequeรฑin buscando un lugar donde resguardarse. Mi amor por los gatos siempre ha sido gigante desde que tengo memoria, asรญ que no dude ni un segundo en traer a ese pequeรฑo sujeto hasta la casa. Todo es mejor que una noche frรญa y una calle sola. Y mรกs en un mundo donde los animales callejeros son tan propenso a maldades inhumanas.
Bajรฉ a comprarme un cafรฉ, y a ver si querรญa venirse conmigo, ya saben ustedes que los gatos callejeros y hasta los de su casa son maรฑosos. Al primer intento me gruรฑรณ, no lo culpo, sabrรก รฉl y Dios por todo lo que tuvo que pasar o soportar. Al segundo intento. creo que su intuiciรณn de gato le dijo que la ayuda venรญa conmigo, o al contrario รฉl me ayudarรญa a mi. Su estado anรญmico no estaba nada bien, era el esqueleto de un gatito con algo de piel, el pobre estaba asustado y hambriento.
Al pasar de los dรญas, con la desparacitaciรณn y las vitaminas, mucho amor y comida. Les puedo decir que Pinkie ha cambiado de ser un gato miedoso a ser el rey de la casa, tiene muchรญsima energรญa y muchรญsimo apetito.
Este es el resultado del amor, Pinkie hoy es un gato sano y feliz.
La lecciรณn de vida hoy amigos, es ADOPTA, porque haciรฉndolo cambia tu vida, y cambias la de alguien mรกs que viene a darte amor. Porque eso hacen las mascotas.
No esperes que el mundo cambie, empieza hoy, empieza Tร.