El día de hoy me levante pensando por qué el ser humano anda en una búsqueda desesperada de la felicidad, mientras caminaba por la calle llegaban a mi mente ciertos pensamientos que una vez escuche en una video conferencia de una psiquiatría española donde recalcaba que el ser humano cree que alcanzando ciertas cosas materiales alcanzará la felicidad, como si para obtener la felicidad plena existiera un manual que te dice, consigue esto, compra aquello, come esto y serás feliz, pero entre tantos pensamientos el mas real es que la felicidad es el sentido que le damos cada uno de nosotros a nuestra vida.
Lo más triste de todo esto es que estamos en una época donde se ha sustituido este sentido de la vida por el gran valor que le damos a las cosas materiales, entonces una vez alcanzadas esas cosas materiales la felicidad desaparece, de ahí que es importante valorar las pequeñas cosas como una camita, escuchar la música favorita, entre otras cosas que nos devuelvan el sentido a la vida.
La felicidad es una decisión porque si lo miramos desde afuera todas las personas a diario están batallando por algo, ya sea un tema económico, un tema de salud, un tema familiar o profesional y la manera de lidiar con esas batallas es la felicidad de ahí lo importante de elegir ser feliz, tratar de gestionar de una manera mas saludable nuestra emociones, según leí hace poco en un articulo de una revista de neurociencia y psicología nuestro cerebro no diferencia si un pensamiento es real o es solo imaginación, la parte subconsciente lo toma con si fuera real y esto genera un impacto negativo en nuestra salud porque aunque solo sea un pensamiento para nuestro cerebro es una realidad, nos estamos autodestruyendo poco a poco cada vez que somos negativos o nos preocupamos de manera exagerada por cosas que no valen la pena o cuya solución resulta ser más sencilla de lo que imaginamos, estas preocupaciones generan estrés que repercute de manera negativa en nuestra salud.
De ahora en adelante debemos elegir ser felices, ser más consientes de nuestros pensamientos y emociones, tratar de encontrar esos puntos de equilibrio realizando otras actividades como el deporte, yoga, entre otras, disfrutar cada momento como si fuera el ultimo.
