Visión 4S: las semillas del crecimiento


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Las complicaciones de toda índole que experimentamos en el mundo de hoy, y las que particularmente vivimos en algunos países concretos, nos sumergen en un mar de decisiones y acciones complejas y urgentes que debemos tomar, ya no sólo con el genuino propósito de prosperar sino incluso para subsistir. Es ese mismo mar de complejidades el que provoca con recurrencia que seamos ineficientes e improductivos en muchos ámbitos, y el que nos hace obviar y hasta menospreciar el poder inmenso que tiene enfrentar esas cuestiones complejas desde las bases, desde las semillas del crecimiento personal y empresarial.

Volver a la simplicidad de las bases es una de las claves más efectivas para superar los problemas con éxito. Es justo la sistemática puesta en práctica de esos fundamentos lo que, desde mi punto de vista, permitirá apuntalar nuestra productividad como nunca antes.

Sin embargo, y aunque suene contradictorio en cierto modo, regresar a lo simple de las bases tampoco es tarea fácil. No es fácil concentrarse sólo en lo “importante ” y desprenderse en forma tajante de todo lo urgente y complicado que nos impone la realidad actual, de todo aquello que hace “mermar nuestra productividad”. Las pérdidas de tiempo, el retrabajo, las frecuentes desviaciones de nuestros objetivos, los errores que cometemos por mala comunicación parecen ser inevitables en nuestras vidas. Pero, a pesar de esa dificultad, creo que aún es posible abordar todas las situaciones empleando un conjunto de destrezas acumuladas bien cultivadas, a la luz de unos principios rectores que orienten nuestro proceder en la dirección de la mayor eficiencia.

La filosofía que hemos bautizado como Visión 4S en Zettabright (Instagram: @vision4s) consiste en desarrollar y aplicar continua, deliberada y metódicamente una serie de habilidades y principios seminales (semilla), de carácter comunicacional, financiero y gerencial, que son cruciales para la evolución individual y organizacional. De hecho, las siglas 4S del nombre son una contracción que hace referencia a las iniciales de las cuatro palabras inglesas contenidas en la frase Smart Seminal Skills and Schemes, cuya traducción al español sería algo como Esquemas y Habilidades Seminales e Inteligentes. En breve, mencionaré algunas de estas habilidades y esquemas cognitivos.

Antes de continuar, debo aclarar con toda honestidad que Visión 4S no es una filosofía ciento por ciento original e innovadora en cuanto a las destrezas y modelos que pretende cultivar en las personas, pero sí es bastante original en lo que respecta a la forma de guiar su aprendizaje e internalización, en la manera de estructurar la formación continua de esas semillas y en la incorporación de elementos de otras corrientes de pensamiento en el área del desarrollo integral humano, como los principios de la Escuela Austríaca de Economía, que son vitales para comprender la acción humana y la empresarialidad en sus correctas dimensiones.

Algo que, en consecuencia, sí pretendo lograr con Visión 4S es rescatar y exaltar la importancia que tiene volver a las semillas del crecimiento para lograr el éxito en el mundo complejo de hoy.

¿En cuáles problemas empresariales se enfoca Visión 4S?

Los problemas que enfrentan las pequeñas y medianas empresas (pymes) en Latinoamérica y muchos otros lugares del mundo constituyen una miríada de auténticos desafíos para los emprendedores, no sólo para lograr “salir a flote” en sus respectivos nichos de mercado sino también para crecer de manera sostenida.

Entre las razones de mayor peso que explican las causas del estancamiento y del fracaso de muchas pymes en la región, según lo revelan algunos estudios en la materia, se encuentran: a) la falta de formación en aspectos clave para el desarrollo; y b) la falta de una cultura organizacional propicia para impulsar el crecimiento. Por supuesto que existen otras razones de fuerza mayor, pero éstas son dos de las más importantes y representan justamente los problemas que Visión 4S resuelve.

Aunque en su origen fue pensado como un modelo para la evolución de las pymes, desde el mejoramiento personal, los principios de Visión 4S son también aplicables a las grandes empresas. Podríamos tender a pensar que todo está hecho, dicho o considerado en las empresas grandes y que no hay nada que mejorar, porque por eso se hicieron grandes. Nada más lejos de la realidad que tal premisa: ellas también pueden estancarse y quebrar si no tienen una visión clara de futuro y si no son capaces de construir una cultura organizacional consistente con esa visión.

En mis diecinueve años de trayectoria en multinacionales, vi cometer errores garrafales y muy básicos tanto a ingenieros como a directivos de medio y alto nivel en diversos departamentos, errores que terminaron minando la productividad de esas compañías al punto de que fueron luego absorbidas por otras, absorciones que para algunos fueron simples “acquisitions” y para otros auténticos “takeovers”.

La falta de una clara visión de futuro, la incapacidad de alinear a todos en torno a los objetivos importantes de mediano y largo plazo, el efecto exacerbado de muchos sesgos cognitivos en la toma de decisiones, la falta de ética basada en ley natural, los desastrosos y retardados procesos de comunicación interna, la escritura errónea de manuales de procedimientos clave para realizar bien el trabajo e incluso la inexistencia de tales manuales son sólo algunas de las cosas que mermaron nuestra productividad como organizaciones. De manera que no, no todo está hecho, dicho o considerado en las grandes empresas. Por ello es que Visión 4S también aplica en lo que concierne a organizaciones de tamaño considerable.

**Algunos esquemas y habilidades seminales e inteligentes que Visión 4S exalta y enseña

  1. Comunicación efectiva y trascendente**

Es fácil menospreciar el impacto que tiene esta habilidad seminal en las organizaciones, “puertas adentro” y “puertas afuera”. La razón quizás sea que su relación con el éxito o crecimiento de un negocio no se ve de forma tan directa. Sin embargo, es tal vez la habilidad seminal más importante, sobre todo para quienes ejercen cargos de liderazgo.

Incluye no sólo la faceta oral de la comunicación, ésa que ponemos en práctica cuando hacemos una presentación de impacto para introducir un producto al mercado; cuando tenemos una reunión con posibles financistas para explicar nuestro proyecto y obtener los recursos que requerimos; cuando debemos presentar resultados de nuestras operaciones ante una junta directiva o de accionistas; cuando aplicamos una estrategia de marketing; o cuando queremos cambiar ciertos aspectos de nuestra cultura corporativa y alinear a todos los empleados.

También incluye la faceta escrita, ésa que aplicamos cuando elaboramos memorandos o emails; cuando construimos procedimientos y alcances de trabajo; cuando plasmamos en papel el importantísimo código de ética que deben conocer y seguir todos nuestros colaboradores; o cuando detallamos un proyecto para que se implemente en la organización.

Por tanto, la pregunta que tendríamos que formularnos respecto de la relevancia que tiene la comunicación en el éxito debería ser: ¿Es posible inspirar, alinear en torno a una visión común, evitar el retrabajo, minimizar los errores procedimentales (y, por consiguiente, las pérdidas), impulsar la simplificación (y con ello la eficiencia) sin una comunicación efectiva y trascendente? Yo creo que la respuesta es que no. Y quiero aportar algo más: ha sido la comunicación lo que ha estado detrás del brutal crecimiento de empresas como Amazon, Apple, Twilio y otras, no sólo sus productos. De esto último, seguramente escribiré un próximo artículo.

2. Conciencia sobre los sesgos

Todos tenemos sesgos cognitivos que afectan nuestra toma de decisiones. Algunos de estos sesgos están profundamente arraigados y “configurados” en nuestros cerebros y se han transmitido de forma generacional en los miles de años de evolución que hemos experimentado, como explican muchos neurocientíficos; otros son aprendidos, inculcados a través del sistema educativo, de nuestra cultura, etcétera.

Lo cierto es que tales sesgos podrían conducirnos a tomar decisiones equivocadas para nuestra vida o empresa si no somos conscientes de ellos. Si los estudiamos de manera metódica, podremos comprender mejor cómo actúan y, por ende, mitigar sus efectos en nuestras decisiones. Quizás nunca podamos anularlos por completo, pero sí apaciguarlos de tal forma que nuestras decisiones sean mucho más “limpias”.

El análisis-parálisis, la preferencia temporal muy alta (también llamada descuento hiperbólico), la prueba social, el anclaje o determinadas reglas heurísticas son sesgos que debemos aprender a controlar para crecer.

3. Visión de largo plazo

El crecimiento sostenido se obtiene en la medida en que logremos bajar nuestra preferencia temporal: sacrificarnos hoy para obtener mayores y mejores resultados mañana.

Si nuestra preferencia por el presente es muy alta, porque nos lo impone el entorno o porque no somos capaces de hallar alternativas, posiblemente experimentemos expansiones coyunturales, pero no estructurales, de sostenimiento en el tiempo.

Y esta visión de largo plazo no sólo se vincula con el desarrollo de los productos y servicios que ofreceremos, sino también con el ahorro y la inversión personal y organizacional. Y ahorro e inversión son dos términos no tienen que ver con la satisfacción de lo inmediato.

Creo en la inversión en portafolios diversificados de largo plazo; en la inclusión de buenos y sanos activos, con poca deuda, con concentración de capital accionario, con fosos económicos y con un manejo sano de sus finanzas. Soy muy partidario de la inversión tipo value, aunque respeto otras corrientes también.

Creo, además, en la indexación de parte de los ingresos de las empresas para su aprovechamiento futuro. La indexación no es más que la inversión en instrumentos líquidos y diversificados que siguen índices o activos importantes a nivel internacional.

4. Filosofía "customer-centric"

La devoción por la calidad de servicio a nuestros clientes y semejantes, por una atención óptima es también fundamental para crecer sostenidamente en el largo plazo.

Podría continuar mencionando otros smart seminal skills and schemes, pero no quiero cansarlos. Ojalá hayan quedado claros los fundamentos de este modelo y la importancia que tiene aplicar de manera continua y deliberada este conjunto de habilidades y principios seminales para poder impulsar nuestro desarrollo en el largo plazo y de manera sostenida; es decir, la importancia que tiene volver a las bases, a las semillas, para poder crecer.

Prof. Luis Cirocco.

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