Hola a todos, Hermanos y hermanas, Dios les Bendiga!
Luego de mirar el Video del Hermano Manny Lotoc acá les dejo opinión plasmada acerca de mis pensares expresados a como Dios nos considera y nos trata, en este caso se resalta su trato hacia nosotros en la misericordia. La misericordia de Dios hacia nosotros, hacia el ser humano; es un aspecto fundamental y como pensamiento veridio, diría yo, que también lo es de la Fe cristiana. Está escrito en la Sagrada Biblia; la misericordia es el amor que aun no mereciendolo -en ocasiones- Dios nos los ha hace merecedores, aun así entonces siempre, dicho Amor redundantemente siempre lo tiene hacia la humanidad, a pesar de nuestras caídas, los errores y pecados.
A lo largo de toda la historia conocida, Dios ha demostrado su misericordia de muchas maneras, desde el principio de nuestra historia -o por lo menos donde se nos hace mencion- la creación del mundo y hasta mas allá, en la contemporaneidad donde ocurre la redención de la humanidad a través de nuestro Señor Jesucristo.
En el Antiguo Testamento si no estoy herrado, encontraremos numerosos ejemplos de carácter si bien; misericordioso del Creador del Todo. Por ejemplo, en el relato del Éxodo, Dios nos enseña, y muestra su misericordia al liberar al pueblo de Israel de la esclavitud en Egipto, a pesar de las quejas y murmuras y sobre todo a pesar de su desobediencia y rebeldía. A través de los profetas, Dios invita una y otra vez al pueblo a volver a Él, incluso cuando se han apartado y han adorado a otros dioses. Y cuando el pueblo se arrepiente y vuelve a Dios, Él los perdona y restaura su relación con ellos, porque Dios todo lo puede y es nuestro padre.
Ahora, en el Nuevo Testamento, ya vemos la misericordia de Dios manifestandose de una manera aún más clara y nítida; en la persona de Jesucristo. Él mismo es la encarnación del Amor y la misericordia de Dios hacia nosotros; la humanidad y en sus enseñanzas, nuestro Maestro Jesús enfatiza la importancia que tiene en sí misma la misericordia y también que tan importante es el Perdón hacia los demás hermanos, y muestra misericordia hacia los que estaban enfermos, los que eran marginados y los que estaban llenos de pecados. Su muerte en la cruz es el mayor ejemplo demostrado por y desde la misericordia de Dios, ya que a través de ella Él ofrece el perdón y la salvación a todo aquel que se arrepiente y cree en Él.
La misericordia que Dios tiene hacia la humanidad no es algo que se agota o se acaba. Es inefable en terminos literales e inconmensurable, o en palabras claras; es infinito, ya que es algo que siempre está disponible para nosotros, independientemente de nuestras condiciones circunstancias o acciones. La misericordia de Dios nos da Esperanza y con cada muestra y oportunidad nos aumenta la Fé, mientras que a su vez nos invita a volver a Él si nos hemos alejado, una y otra vez, incluso cuando nos alejamos o caemos en la tentación del pecado. Y cuando nos arrepentimos y pedimos su perdón, Dios siempre responde con Amor, porque para siempre es su misericordia.
A pesar de que tocamos el tema con la vision puesta al antiguo testamento, pero, aún en el dia de hoy; la misericordia de Dios hacia nosotros, la humanidad; sigue siendo igual de relevante que en aquellas épocas en las que se escribió la Biblia. Dios continúa mostrándonos su amor inmerecido -o no- a pesar de nuestros errores y pecados. En lugar de juzgarnos o castigarnos, Dios nos ofrece su perdón y su Agape -Amor incondicional-.
En un mundo que a menudo parece estar dividido por la desigualdad, la injusticia y la violencia, la misericordia de Dios es una fuerza poderosa que nos une y nos da esperanza. Nos recuerda que a pesar de nuestras diferencias, todos somos hijos e hijas amados de Dios y que todos somos merecedores de su amor y perdón.
La misericordia también nos llama a ser compasivos y perdonar a los demás, incluso cuando nos han hecho daño o nos han tratado injustamente. Es un llamado a la reconciliación y a la sanación, tanto para nosotros mismos como para los demás.
En resumen, la misericordia de Dios es una expresión del amor divino hacia la humanidad que sigue siendo relevante y poderosa en nuestra vida cotidiana. Nos muestra el camino hacia la sanación, la reconciliación y la unidad que necesitamos como sociedad y como individuos.