Trastorno
Esa mañana fue diferente, sentía que me asfixiaba, tendido en el suelo observando a alguien que desconocía, solo lograba ver sus botas industriales y un pantalón negro. Camina hacia mí y siento como el pánico destruye mi confianza. Al tenerlo enfrente noto que su rostro es igual al mío, pero no era yo.
Me ayuda levantar y mientras camino vuelven mis fuerzas, llego a la sala donde estaba una mujer hermosa amarrada y dos tipos, también con mi rostro. Me dicen:
¿Qué haremos con esta?
La traemos como te gusta.
¿Quieres hacerle el primer corte?
No sabía lo que sucedía, pero quise que siguiera, sentía poder detenerlo, pero también sentía como me daba una emoción de grandeza muy placentera. Tome el cuchillo y le marque en la frente “MÍA”, en ese momento algo se apodero de mí, todos la despedazamos y perdí la conciencia.
Desperté por la tarde, pienso solo fue una pesadilla, y veo mis sabanas teñidas de rojo, y una nota que decía:
Gracias por acompañarnos, la próxima estarás con nosotros por más tiempo.
Fuentes: