Hoy, 5 de diciembre, es el Día del Profesor Universitario en Venezuela, fecha establecida para conmemorar el Decreto de Ley de Universidades del 05/12/1958, firmado por el Presidente de la Junta de Gobierno, Profesor (UCV), Edgar Sanabria.
Nuestras universidades autónomas, y entre ellas a la que pertenezco, la Universidad de Oriente, de la que soy profesor jubilado, viven –desde hace varios años– sus peores momentos; obviamente, los profesores somos víctimas de esa terrible situación.
Inevitable que uno recuerde a profesores que lo acompañaron y marcaron. Así, quise publicar un poema elegíaco que permanecía inédito, modificado algunas veces, escrito a raíz del fallecimiento de un amigo (2007), que fue mi profesor y luego colega, Enrique Cabrera, en la Universidad de Oriente (Núcleo de Sucre, Cumaná), de quien aprendí mucho, no sólo conocimiento formal, sino disciplina, dedicación, amabilidad, solidaridad, en suma, bonhomía.
Elegía para Enrique
in memoriam
Tu voz ronca de aliento
tus gestos hablantes
tu caminar de duende
estaban siempre ahí
diciéndonos la sosegada inquietud
de una vida incandescente
erigida en el compartir
*
Un recuerdo de Beatles y Serrat
Un recuerdo de billar y cerveza nocturna
Un recuerdo que pasa como un río
como un perfume discreto en tu presencia
Un recuerdo que es palabra
vivida y acompañante
en el centro de esta tierra
*
Será tu voz
augural y resonante
Será tu sacrificial tránsito
la heredad primordial
para encontrarte nuevamente
con un café
(y quizás un cigarrillo)
deseosos de vida
sin muerte que nos separe
