Hace unos días me enteré tristemente del fallecimiento del artista y hiver amigo @lecumberre. En vida, pudimos admirar y felicitar al otro por composiciones varias que seguramente nos enorgullecía compartir en la comunidad.
Amigo poeta, ojalá, donde estés, te regodees de felicidad en tu corazón, al ver como escribimos sonetos a tu memoria. Brille para ti la luz eterna.
Lecumberre en su reencuentro
Retorné a mi ciudad todo vencido,
la silueta del verde Manzanares
enturbia el gran cauce de mis pesares.
¡Ay!, por más que me sienta bienvenido.
En el agua veo mi rostro herido,
no consigo retomar mis andares,
a menos que entone esas populares
mil canciones en mi cuatro querido.
Sólo María, la del manicomio,
en su amor desquiciado por mi canto,
muy pronto en La Matica me escuchaba.
A ella quizás le pida matrimonio,
aún yo sin tanta gracia ni encanto,
le juraba a mi Dios mucho me amaba.
