Ayer en mi paseo de los miércoles me acerqué al cenizario Jardín de la Esperanza, ubicado al lado de la iglesia La Anunciación del Señor, en la urbanización La Boyera, en el municipio El Hatillo del estado Miranda, en Venezuela.
El cenizario funciona en un hermoso y muy bien cuidado parque jardín, donde la mencionada iglesia construyó varias estructuras de cemento y baldosas, en las cuales están dispuestos los nichos funerarios, que sirven de resguardo de las cenizas de los fieles difuntos de esta parroquia eclesiástica, cuyos familiares hayan querido que las mismas reposen allí. Para lo cual, tienen que formalizar un contrato de uso con la respectiva administración de la Iglesia, quienes son los propietarios del Jardín y a la vez son los que ofrecen el respectivo servicio.
En el Jardín de la Esperanza se respira paz y tranquilidad. Ubicado en un sector con un excelente clima de montaña, es un lugar silencioso que invita a la reflexión y la espiritualidad. Paradójicamente, siendo un sitio funerario, allí se percibe una energía vital. Al menos, eso es lo que yo siento allí, a pesar de ser una persona que rehuye a todo lo que tenga que ver con la muerte.
Por otra parte, como todo jardín posee una variedad de plantas y en este caso, la mayoría son del tipo suculentas, las cuales están sembradas en distintos porrones ubicados en unas estructuras metálicas hechas especialmente para colocarlas allí.
Con las suculentas pasé un rato muy ameno al descubrirlas, contemplarlas y finalmente fotografiarlas para esta publicación. A continuación pueden apreciar una serie de ellas:
En el jardín también están presentes las bromelias tal como se pueden apreciar en las siguientes fotografías.
Por otra parte, también vi algunas orquideas
Como les dije anteriormente, en este sitio me repotencié, al disfrutar y contemplar toda esta variedad de plantas y flores que conviven en este jardín, además de escuchar el canto de muchas aves que sobrevuelan el lugar. De verdad que me gusta mucho este espacio para el recogimiento, la oración,la meditación, el encontrarme conmigo misma y poder respirar la paz y la armonía que este espacio transmite.
Así que en este día de acción de gracias en el cual estoy haciendo esta publicación, siento un profundo agradecimiento por todo lo que esta vida me ha dado, así como el haber visitado este privilegiado lugar y el hecho de estar ahora en #Hive, generando todo el contenido que desee publicar, siempre con mucho respeto e intención de que sea de gran provecho y del agrado de todos ustedes.
Todas las fotografías son de mi propiedad, tomadas con un celular Samsung A03
English
Yesterday on my Wednesday walk, I went to the cenizarium Garden of Hope, located next to the church La Anunciación del Señor, in the urbanization La Boyera, in the municipality of El Hatillo in the state of Miranda, Venezuela.
The ashes are kept in a beautiful and well maintained garden park, where the church built several cement and tile structures, in which are arranged the funeral niches that serve as a shelter for the ashes of the faithful departed of this ecclesiastical parish, whose relatives have wanted them to rest there. For which they have to formalize a contract of use with the respective administration of the Church, who are the owners of the Garden and at the same time are the ones who offer the respective service.
In the Garden of Hope you can breathe peace and tranquility. Located in a sector with an excellent mountain climate, it is a quiet place that invites reflection and spirituality. Paradoxically, being a funerary site, a vital energy is perceived there. At least, that is what I feel there, despite being a person who shuns everything that has to do with death.
On the other hand, as every garden has a variety of plants and in this case, most of them are of the succulent type, which are planted in different pots located in metal structures specially made to place them there.
With the succulents I had a very pleasant time discovering them, contemplating them and finally photographing them for this publication. Below you can see a series of them:
Bromeliads are also present in the garden as can be seen in the following photographs.
On the other hand, I also saw some orchids.
As I told you before, in this place I felt empowered, enjoying and contemplating all the variety of plants and flowers that coexist in this garden, as well as listening to the song of many birds that fly over the place. I really like this place for meditation, prayer, meeting myself, as well as being able to breathe the peace and harmony that this space transmits.
So on this day of thanksgiving in which I am making this publication, I feel a deep gratitude for all that this life has given me, as well as having visited this privileged place and the fact that I am now in #Hive, generating all the content that I want to publish, always with all respect and with the intention that it will be of great benefit and to the liking of all of you.
All photographs are my property, taken with a Samsung A03 cell phone.
This is a post to go with #WednesdayWalk challenge by @tattoodjay.
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