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Un cultivador despierta en el mundo moderno, está en un mundo extraño para él, encarnado en el cuerpo de un joven señorito de una familia distinguida, pero uno que es un desperdicio impotente y que ha sido abandonado y despreciado. Ahora busca maneras de aumentar su fuerza en este mundo sin energía de cultivo y trazar su camino de retorno para cobrar su venganza.
Capítulo 0299 - Encontrando una nueva residencia
Ye Mo se paró en la puerta del bullicioso bar y miró su anillo. Todavía había alrededor de 10.000 en efectivo. Ahora solo tenía una idea y era encontrar un lugar seguro para recuperarse y empezar a preparar pastillas.
Originalmente, si no estaba expuesto, ese pequeño patio en Ning Hai sería el mejor, pero ahora, Ye Mo no se atrevía a ir allí en absoluto. Ir allí sería caer directamente en una trampa. Solo pudo encontrar un lugar que nadie conocía para esconderse y preparar pastillas.
El coral de sangre en sus manos fue suficiente para hacer 3 calderos de píldoras, pero Ye Mo no se atrevió a ser descuidado en absoluto. Con sus habilidades actuales, estos 3 calderos de píldoras podrían no ser buenos. Entonces, tenía que encontrar un lugar tranquilo, un lugar lleno de chi espiritual. Incluso necesitaba esperar primero a una recuperación completa.
Pero ahora, solo tenía esa cantidad de dinero y, al ver este lugar al que nunca había venido antes, Ye Mo se sintió bastante perdido sin su poder.
"Hermano mayor, ¿necesitas ayuda?" Una mujer con el pecho semidesnudo caminó frente a Ye Mo y preguntó mientras cruzaba los brazos sobre su pecho. Sus ojos estaban llenos de seducción. Aunque su apariencia era normal, bajo la luz tenue y cubierta por un perfume barato, era sexualmente atractiva.
Ye Mo apenas sonrió y negó con la cabeza: "No es necesario". Luego, se volvió para irse.
Pero esta mujer no se dio por vencida y lo detuvo e incluso dijo preocupada: “Hermano mayor, estoy muy limpia. No tengo ninguna enfermedad. Si no me cree, puede usar condón ".
Ye Mo frunció el ceño y miró a esta mujer con maquillaje espeso y volvió a decir: “Lo sé, pero realmente no quiero. Todavía estoy ocupado. Adiós."
Esta mujer miró a Ye Mo mientras la decepción y el mal humor brillaban en sus ojos. Aunque tenía que participar en este negocio, si era posible, todavía quería clientes que fueran decentes. Ese joven vestía de manera normal, pero su temperamento tranquilo hizo que ella realmente quisiera hacer negocios con él. Incluso podría bajar un poco el precio. Pero este joven no la quería, incluso él no parecía rico.
Ye Mo suspiró. Había mujeres como ella en todas partes. No como los burdeles de Luo Yue, simplemente salían a las calles para conseguir clientes. No despreciaba a esas mujeres. Si es posible, creía que nadie querría hacer esta carrera.
La mujer de repente se mordió la boca y corrió para detener a Ye Mo: “Hermano mayor, veo que no estás muy familiarizado con esto. Estabas mirando a tu alrededor. Puedo ayudarte y satisfacer cualquier solicitud que tengas. Mi precio no es alto".
Ye Mo miró aturdido a esta mujer y pensó que quería encontrar un lugar tranquilo para quedarse. Iba a costar dinero para un agente, así que bien podría dejar que esta mujer ganara algo. Sería una pequeña ayuda para ella. Además, si quería un agente, tendría que esperar hasta mañana y correr el riesgo de exponerse.
Pensando en esto, Ye Mo asintió y dijo: “Está bien, no tengo un lugar donde vivir ahora. Quiero encontrar un lugar tranquilo y limpio para vivir. Si puede ayudarme a encontrar una casa así, estoy dispuesto a pagarle. Pero también soy pobre y no tengo mucho conmigo. Si es posible, vendré a esperarte aquí mañana".
Ye Mo realmente no tenía mucho dinero. Solo tenía un poco más de 10.000. En una ciudad como esta, los gastos de manutención serían de al menos 3000 al mes.
La mujer negó con la cabeza: “Hermano mayor, está bien. Cobro poco. Si no tiene suficiente dinero, puede dármelo más tarde, después de que se establezca. También puedes mirar casas conmigo esta noche. Si está de acuerdo, puede mudarse mañana. Mi casa esta muy cerca. Son solo dos minutos".
Ye Mo inmediatamente tuvo una buena impresión de esta mujer. Dicen que las prostitutas son desalmadas y los actores desleales. Esta prostituta podía decir esas palabras sinceras en el sentido de que anhelaba la amistad y la confianza.
Si pudiera encontrar un lugar para mudarse mañana, podría empezar a hacer sus propias cosas antes. Además, Ye Mo no quería ir a buscar una casa a la mitad del día. Se podría decir que la sugerencia de esta mujer era justo lo que quería. Era posible que esto fuera una trampa, pero realmente no le importaba. Aunque no podía atacar, no le importaba usar algunos encantamientos de bolas de fuego.
….
No muy lejos del bar aparcó un coche normal. En él, dos policías miraban a Ye Mo y a esa mujer. Vieron a los dos salir del bar y rápidamente los siguieron.
Una vez hecho esto, nuestra misión para este mes ha terminado. El mes que viene, realmente ya no quiero capturar a estas personas. Es repugnante mirarlo. De lo único que hablan es de dinero. Este es un comercio de dinero y carne completamente repugnante ". La joven policía le dijo a ese policía.
Ese policía se rió: “Lo entenderás en el futuro. A la gente le encanta aprehender el comercio sexual. No solo es seguro, sino que mejora su historial rápidamente y obtiene un buen pago. Además, a todos nos encanta..."
"Deja de ser repugnante..." Esa mujer policía detuvo las palabras del hombre. Aunque no estuvo mucho tiempo en el departamento de policía, sabía en qué estaban pensando sus colegas masculinos. No eran mejores que ese hombre. Después de un rato, murmuró para sí misma: "Quiero entrar en el escuadrón principal contra el crimen".
La mujer policía quiso decir sus palabras. Por lo general, eran los policías los que buscaban comercio sexual. Rara vez había una mujer policía. Quería ingresar a la brigada contra el crimen mayor, pero no tenía experiencia. Entonces ella no tenía derecho a entrar. Por lo tanto, vino aquí en busca de experiencia. Después de este mes, se acabaría.
Sin embargo, había un punto en el que su colega tenía razón. Barrer para el comercio sexual era una forma muy eficaz de obtener buenos récords.
Si hubiera sido antes de que Ye Mo fuera herido, habría notado que alguien lo seguía con su sentido espiritual. Pero ahora, estaba demasiado herido y su chi espiritual estaba casi agotado. No se atrevió a escudriñar su sentido espiritual. Además, acababa de llegar a una nueva ciudad y no creía que hubiera alguien que lo siguiera.
“Tengo un buen amigo que está haciendo negocios de propiedades en la ciudad de Hui An. Puedo obtener mucha información sobre propiedades, así que no se preocupe, puedo encontrar un lugar que le guste". La mujer temía que Ye Mo no la creyera, así que siguió tranquilizándola.
Ye Mo realmente no quería hablar. Para él, era suficiente encontrar un lugar adecuado para vivir. No le importaba de dónde sacó la mujer su información.
Al ver que Ye Mo no hablaba, la mujer pensó que Ye Mo no le creía, por lo que rápidamente dijo: "También necesitamos cambiar de lugar con frecuencia, por lo que también necesitamos información sobre la vivienda".
Ye Mo aturdido. ¿Por qué seguían cambiando de lugar?
Pero antes de que Ye Mo hablara, la mujer continuó: “Estamos aquí. Mis pocas amigas y yo vivimos aquí. Hay internet adentro, te lo mostraré y lo sabrás".
Ye Mo siguió a esta mujer a una habitación en el segundo piso. La mujer cerró la puerta y entró para abrir la computadora mientras decía: “Te sientas un rato. Podemos conseguirle la información sobre la vivienda de inmediato".
Ye Mo estaba muy feliz con la forma en que esta mujer hacía las cosas. Era mejor cuanto más rápido para Ye Mo.
"Lo encontré. Ven y mira cuál te conviene". La mujer fue muy rápida.
Ye Mo se puso de pie pero no caminó hacia la computadora. En cambio, abrió la puerta de repente. Se burló de los dos policías afuera de la puerta: "Ustedes realmente son los sirvientes de los ciudadanos, parados afuera para vigilarnos gratis".
Esa joven policía se sonrojó e inmediatamente cambió a una expresión de disgusto y burla: "Deja de actuar inocente, sospecho que estás involucrado en el comercio sexual".
“Vete a la mierda, si te atreves a decir algo te reportaré de inmediato. ¿Qué ojo me vio en el comercio sexual? Oh, ¿te enviaste aquí para comerciar con sexo? Lo siento, no estoy interesado en ti. Contaré hasta tres. Si aún te quedas aquí, te reportaré de inmediato. Si no me cree, puede intentarlo". Ye Mo se sintió desafortunado. Estas personas estaban tan aburridas que hicieron cosas tan inútiles. Si no tuviera miedo de que las cosas se agrandaran, ya se habría derrumbado.
"Tú..." El rostro de esta mujer policía estaba pálido de ira y estaba a punto de atacar.
Ye Mo estaba esperando que ella atacara. Si lo hacía, le enseñaría una lección de inmediato. Aunque no tenía chi espiritual, aún podía enfrentarse a dos policías.
"Zhang Feng, vámonos". Ese policía miró una vez a Ye Mo y se llevó a la mujer policía. Pero antes de irse, le dijo a Ye Mo: "No caigas en mis manos la próxima vez".
"Muy bien, de hecho, no caigas en mis manos la próxima vez". Ye Mo se burló.
Esta mujer policía estaba bastante enojada con Ye Mo, pero sabía que no tenía pruebas. Hoy, ella realmente no entendió lo que sucedió. Por experiencias pasadas, los comerciantes sexuales solían meterse en la cama de inmediato. Quién esperaría un rato y abriría la puerta.
“Incluso si no lo atrapamos, no hay necesidad de tenerle miedo. ¿Por qué nos vamos?" Zhang Feng todavía estaba descontenta.
Este policía obviamente tenía más experiencia que Zhang Feng. Dijo con impotencia: “Es nuestro error estar parados en su puerta sin atraparlo. Si él demandaba, seríamos nosotros los que sufrimos. Para la gente común, no los dejaría ir, pero ¿viste a ese hombre? No solo tenía los ojos fríos, sino que no tenía miedo en absoluto. Eso significaba que tenía el poder detrás de él para apoyarlo. Solo somos pequeños policías. Cualquier cosa puede derribarnos. Pero como esta persona ya tiene antecedentes de autoridad, todavía viene a buscar prostitutas a las calles, sin ninguna clase".
La mujer que estaba mirando las casas vio a los dos policías e inmediatamente se asustó y palideció, pero no esperaba que Ye Mo realmente asustara a los dos policías.
"Date prisa y busca una habitación, es mejor si puedo mudarme esta noche". Ye Mo se apresuró.
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