Since I gave my youngest son a taste of ice cream, his relationship with candy has changed forever.
He was about 8 or 9 months old when I shared some of my cone with him on a hot day, and although the first impact made him crumple his face, he always came back for more.
Now, 8 years later, every time I need to go out and I have to take him with me, I have the perfect incentive, because many times he doesn't want to go, but when I offer him an ice cream as a reward, he doesn't hesitate to get ready to go.
It may be seen as a bribe, but I think that in this type, not only he is one of those who does not refuse to receive them.
Would you accept a bribe like this? I read them
Desde que le di a probar el helado a mi hijo menor, su relación con el dulce cambió para siempre.
Tendría unos 8 ó 9 meses cuando le compartí un poco de mi cono, en un día caluroso y aunque el primer impacto lo llevó a arrugar su carita, siempre volvía a pedir un poco más.
Ahora, ya 8 años después, cada vez que necesito salir y debo llevarlo conmigo, tengo el incentivo perfecto, pues muchas veces no quiere ir, pero al ofrecerle un helado como recompensa, no duda en arreglarse para irnos.
Puede que se vea como un soborno, pero creo que en este tipo, no solo él es de los que no se niega a recibirlos.
Aceptarías un soborno como este? Los leo
Pictures by/ Fotos por: @mamaemigrante
Taken with/ tomadas con: Motorola E5 cellphone
Edited by/ editado por: @mamaemigrante
Traslated with / traducido con: Deepl