ITALIANO
Cari amici, come avrete potuto vedere, ultimamente non mi sta riuscendo di postare quasi nulla, ma spererei quantomeno uno o due post a settimana di poterveli assicurare, quantomeno dalla prossima, dato che in questa potrebbe risultarmi parecchio faticoso. Non mi sta più nemmeno riuscendo di partecipare a troppi giveaway dei miei NFT per mancanza di tempo. Al massimo a 4 e neppure quotidianamente. Questo a causa di svariate circostanze: due buone, una neutra e una così e così. Comincio da quest'ultima: un piccolo intervento chirurgico, sia pure ambulatoriale, di mio marito, che sta aumentando i miei lavori domestici per forza di cose (ma l'importante è che è andato meglio di quanto sperassimo e ringrazio per le preghiere della mia studentessa collega insegnante (è mia correligionaria, così come le famiglie delle bimbe piccole del giovedì), alla quale ho suddiviso le ore di lezione su più giorni, se no la cosa non era fattibile.
Le due buone:
le nostre vacanze in un piccolo centro montagnoso a 3 ore di distanza (percorse via UBER), del quale spero riuscire a discorrere nel dettaglio prossimamente. È stato un lungo fine settimana splendido. Eravamo partiti venerdì e siamo tornati lunedì pomeriggio, dopo circa due anni che saltavamo le ferie
il mio lavoro d'insegnante, sia offline che online che sta aumentando, a tal punto da aver dato lezione il giovedì prima della partenza e il lunedì sera appena tornata. Non vi dico in che condizioni, dopo aver disfatto i miei bagagli (mio marito si occupa da solo dei suoi senza di me😂) e lavato un bucato. Ma l'importante è che grazie a Dio il lavoro c'è. Normalmente ho sempre trovato studenti per al massimo un giorno a settimana, mentre da quest'anno da tre a quattro
La notizia neutra: che ho pure da studiare. La mia seconda specializzazione non è infatti ancora terminata e me la devo trascinare quantomeno per tutto quest'anno. Mi mancano un esame e l'articolo scientifico obbligatorio (la cui parte spinosa non è scriverlo, che quello è risolvibile in una settimana, due al massimo, ma purtroppo la formattazione, che costituisce il 60% di tutto il lavoro, con l'aggravante dei salti mortali da fare perchè le università adorano il mondo Microsoft -linuzzo, Open Office e Libre Office mai neppure nominati- quindi lo standard formattabile fa sempre riferimento al pietoso pacchetto Office che tirerei dal finestrino🤣). Insomma, il periodo più ostico di tutta la specializzazione, ma quest'ultima è considerata desiderabile per la presentazione curriculum nelle scuole di lingue e dunque assolutamente imprescindibile. Specie considerato che costituisce pure requisito minimo per l'eventuale insegnamento in qualche piccola università privata.
Scusate tanto che purtroppo non mi è possibile dilungarmi oltre, ma faccio che darvi un anticipo delle mie ultime ferie, caricandovi un paio di foto della catena montagnosa e collinare definita Serra Das Araras (prende il nome da simpaticissimi uccelli tipici che si chiamano appunto arara, che un tempo lontano ci vivevano), scattate con il mio Moto G10 mentre mi trovavo in macchina al ritorno (un amico di mio marito che lavora come UBER ci aveva portato):
Alcuni km più avanti:
Un esempio di arara del tipo azzurro (Pixabay 100% free, trovato in https://pixabay.com/pt/photos/p%c3%a1ssaro-arara-azul-ornitologia-406776/):
Ps.: questo articolo era quasi pronto la settimana scorsa, ma una malattia insperata (mancava infatti soltanto la cattiva notizia tra le svariate e quest'ultima non ha tardato ad arrivare😂) che mi ha costretto a letto per circa cinque giorni e pronto soccorso ha causato l'ulteriore ritardo
ESPAÑOL
Queridos amigos, como seguramente vieron, últimamente no logré publicar nada. Además, ya no consigo participar en muchos de los giveaway de mis NFT por falta de tiempo. Como máximo cuatro y tampoco diariamente. Sin embargo, por lo menos comenzando a partir del próximo lunes, espero asegurarles al menos una o dos publicaciones a la semana, ya que en esta me puede resultar bastante cansino. Esto se debe a cuatro circunstancias: dos buenas, una neutra y una sin mucha pena ni gloria, si así puedo definirla. Empiezo por la última: una pequeña intervención quirúrgica (aunque para pacientes ambulatorios), de mi marido, que está incrementando mis tareas domésticas por necesidad. Pero lo importante es que fue mejor de lo que esperábamos y agradezco las oraciones de mi alumna adulta (es mi correligionaria, al igual que las familias de las niñas de los jueves), a la que repartí las horas de clases en varios días (de lo contrario, se desbordaría en un momento como este).
Las dos buenas:
nuestras vacaciones en un pequeño pueblo de montaña a 3 horas de distancia (viajamos en UBER), que espero poder publicar en detalle próximamente. Fue un largo y maravilloso fin de semana. Nos fuimos el viernes y volvimos el lunes por la tarde, después de casi dos años de saltarnos las vacaciones
mi trabajo de profesora, tanto presencial como virtual, que va aumentando, hasta el punto de que di clases el jueves antes de la salida y el lunes por la tarde nada más volver. No voy a decir en qué condiciones me encontraba, después de deshacer mis maletas (muy bien que mi marido siempre se ocupa de la suya sin mi supervisión😂) y lavar una carga de ropa. Pero lo importante es que gracias a Dios el trabajo está ahí. Normalmente, siempre encontraba alumnos como máximo un día o dos a la semana, pero desde este año de tres a cuatro
La noticia neutra: también tengo que estudiar. Mi segundo posgrado no terminó aún y tengo que arrastrármelo por al menos todo este año. Me faltan un examen y el artículo científico obligatorio. Hablando de él, lo complicado no es escribirlo, pues esto se soluciona en una o dos semanas, sino el infeliz formateo. Que supone el 60 % de todo el trabajo. Con la carga pesada de las volteretas que hay que dar porque a las universidades les encanta el mundo Microsoft (Open Office y Libre Office se quedan siempre de patito feo, así como todo el maravilloso Linux), debido a que las normas de formateo siempre se refieren al cutre paquete Office que, dicho entre nosotros, tiraría por la ventana🤣. En definitiva, este es el periodo más difícil de todo el posgrado. Pero cabe decir que los posgrados en el Brasil son muy deseables para la entrega del currículo en las escuelas de idiomas. Por lo tanto, terminantemente imprescindibles. Sobre todo teniendo en cuenta que también constituyen requisito mínimo para la eventual enseñanza en alguna pequeña universidad privada.
Siento mucho no poder extenderme más: sin embargo, les voy a adelantar algo de mis últimas vacaciones, subiendo un par de fotos de la cordillera conocida como Serra Das Araras (lleva el nombre de unos simpáticos pájaros llamados araras, que un día lejano vivían allí), tomadas con mi Moto G10 mientras nuestro amigo trabajador UBER conducía de vuelta:
Unos kilómetros más adelante:
Un ejemplo de arara, del tipo azul (Pixabay 100% free, encontrado en https://pixabay.com/pt/photos/p%c3%a1ssaro-arara-azul-ornitologia-406776/):
Ps.: este artículo estaba casi listo la semana pasada, pero una enfermedad no esperada (lo único que faltaba era la mala noticia de por medio, y la mala noticia no tardó en llegar😂) que me obligó a estar en cama unos cinco días y al final en urgencias es causadora del nuevo retraso