El calor de un Jueves Santo, agobia a una joven estudiante universitaria quien decide aventurarse con unos amigos en un viaje de excursión, donde surgirán circunstancias aterradoras que marcarán su vida para siempre.

/ The heat of Holy Thursday overwhelms a young college student who decides to venture out with some friends on a hiking trip, where terrifying circumstances will arise that will mark her life forever.

   Llega la tarde del día Jueves de esta Semana Santa. Alicia, la joven estudiante universitaria de prominente cabello rojo como la sangre, no consiguió pasaje en el autobús para poder regresar a casa de su familia y pasar las vacaciones allí. Así que no tiene más opciones, debe pasar todos los días libres dentro de su dormitorio en la residencia de la universidad, al igual que otros estudiantes que viven demasiado lejos, como para viajar en unas vacaciones tan cortas.

   Sola en su cuarto se siente agobiada, triste y su cuerpo está empapado de sudor. Alicia debe soportar la terrible ola de calor que azota a la región en estos días, en su humilde cuarto de estudiante no cuenta ni siquiera con un ventilador para apaciguar el calor, así que solo se limita a salir constantemente a la ventana que da al patio principal intentado conseguir algo de aire fresco, aunque realmente el aire externo es tan caliente que parece provenir desde el mismísimo infierno.

  Asomada en la venta, puede ver como un olor extraño se apodera de todo a su alrededor repentinamente, la montaña comienza a verse borrosa, es como una especie de niebla pero su olor es más bien parecido al del humo, no es fría, al contrario, es muy caliente y sofocante. Uno de sus amigos le grita desde el patio que baje, porque en las alturas la calina se hace más fuerte. Ese es el nombre que le dan popularmente a la extraña concentración de vapor en épocas calurosas.

   Aquella noche del Jueves, Alicia es invitada por algunos compañeros de clase a pasar unos días en un campamento. La montaña cercana parece un excelente lugar para hacer un viaje de excursión y al menos disfrutar un poco los días de vacaciones, así que acepta. Los chicos emprenden la caminata de ascenso a la pequeña colina, no es más de una hora de camino, asegura el estudiante del grupo de excursionismo que conoce muy bien la zona y que sirve de guía a sus compañeros.

   A medida que avanzan el aire se torna más denso, y el ardor en sus ojos se siente cada vez más fuerte producto de la extraña niebla caliente que estaba azotando a la región. Al llegar la noche por fin arribaron al lugar para acampar. Allí comienzan a instalar las carpas, y los expertos crean una fogata para contar historias y pasar el rato, entre risas, bebidas e incluso como cosa normal entre estudiantes de esa edad, algunos fuman cigarrillos y otras sustancias.

   En medio de la improvisada fiesta, cuando ya comenzaban a surtir efecto las bebidas alcohólicas y las otras cosas, una chica saca de su bolso una pequeña tabla negra de aspecto muy antiguo. Susana, como era su nombre, les contó a los presentes bajo la luz de la fogata una historia de terror sobre el infernal poder del artefacto. Según afirmó ella, la tabla Ouija le perteneció a su más lejano antepasado en América, cuenta la leyenda que ha pasado de generación en generación en su familia, y la tabla remonta sus orígenes a los pioneros que poblaron el continente Americano. Pero nadie sabe a ciencia cierta cómo llegó a manos de su familia.

   La historia causó miedo en algunos, pero risas en otros como Alicia, que no era creyente de ningún tipo de cosas paranormales. Conversaciones diversas surgieron en torno al macabro objeto contando sobre lo peligroso que era usarlos y aún más un Jueves Santo, momento en que se cree que las puertas del infierno permiten que algunas entidades malignas muy poderosas caminen por la tierra. Alicia tomó la tabla de manera sorpresiva y la colocó en la mesa diciendo: ¿Veamos cuantos valientes quieren jugar con esto? Ya les demostraré que no pasa nada es solo un juego dijo.

   Por largos minutos la chica de cabellos rojos, intentó utilizar la tabla sin que nada pasara, a manera de burla comenzó a temblar fingiendo para luego reír y decir vean como los demonios me hacen temblar. Los otros chicos no estaban tan convencidos de que jugar con algo así fuera una buena idea, así que trataron de advertirle que era mejor respetar algunas cosas. Alicia hizo caso omiso de la advertencia, en medio de su ebriedad siguió con su burla hacia la tabla, gritando vean nada pasa, y entonces salieron de su boca unas palabras tan sacrílegas que se arrepentiría para siempre de haberlas pronunciado desde el manicomio donde vive en nuestros días.

   ¡Esta tabla es una farsa, al igual que los supuestos demonios que le dan poder! Justo al terminar esas palabras, se escuchó la carcajada y aplausos de una voz gruesa y tenebrosa que apresó bajo el terror absoluto a todos los presentes, desde la oscuridad del bosque, un alto de aspecto intimidante caminó en dirección a la Alicia, mientras el resto de sus compañeros se encontraban totalmente inmóviles como estatuas de sal solo mirando, ingenua niña, ¿es que acaso nunca escuchaste el viejo refrán? ¡Cuidado con invocar al Diablo en Semana Santa, porque se te puede aparecer!

Gracias por leer.

Esta historia es ficticia y no representa a nadie en particular

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   Thursday afternoon of this Holy Week arrives. Alicia, the young college student with prominent blood-red hair, did not get a bus ticket to return home to her family and spend the vacations there. So she has no other options, she must spend every free day inside her dorm room in the university residence, just like other students who live too far away to travel on such a short vacation.

   Alone in her room, she feels overwhelmed, and sad, and her body is drenched in sweat. Alicia must endure the terrible heat wave that plagues the region these days, in her humble student room she doesn't even have a fan to appease the heat, so she is limited to constantly going out the window overlooking the main courtyard trying to get some fresh air, although the outside air is so hot that it seems to come from hell itself.

   Leaning out in the sale, she can see how a strange smell suddenly takes over everything around her, the mountain starts to look blurry, it is like a kind of fog but its smell is more like smoke, it is not cold, on the contrary, it is very hot and suffocating. One of his friends shouts to him from the courtyard to come down, because at high altitudes the haze gets stronger. That is the name popularly given to the strange concentration of steam in hot weather.

   That Thursday night, Alice is invited by some classmates to spend a few days at a campground. The nearby mountain looks like a great place to take a hiking trip and at least enjoy the vacation days a bit, so she accepts. The boys set off on the hike up the small hill, it's no more than an hour's walk, assures the student from the hiking group who knows the area very well and serves as a guide to his classmates.

   As they advance, the air becomes thicker, and the burning in their eyes feels stronger and stronger due to the strange hot fog that was plaguing the region. At nightfall, they finally arrived at the campsite. There they begin to set up the tents, and the experts create a bonfire to tell stories and pass the time, among laughter, drinks, and even as a normal thing among students of that age, some smoke cigarettes, and other substances.

   In the middle of the improvised party, when the alcoholic beverages and other things were beginning to take effect, a girl took out of her bag a small blackboard of a very old aspect. Susana, as was her name, told those present under the firelight a horror story about the infernal power of the artifact. According to her, the Ouija board belonged to her most distant ancestor in America, according to the legend that has passed from generation to generation in her family, and the board traces its origins to the pioneers who populated the American continent. But no one knows for sure how it came into the hands of his family.

   The story caused fear in some, but laughter in others like Alicia, who was not a believer in anything paranormal. Various conversations arose around the macabre object telling about how dangerous it was to use them and even more so on a Holy Thursday, a time when it is believed that the gates of hell allow some very powerful evil entities to walk the earth. Alicia took the board by surprise and placed it on the table saying: "Let's see how many brave people want to play with this? I'll show them that nothing happens, it's just a game," she said.

   For long minutes the red-haired girl tried to use the board without anything happening, by way of mockery, began to tremble, pretending to then laugh and say see how the demons make me tremble. The other kids were not so convinced that playing with something like that was a good idea, so they tried to warn her that it was better to respect some things. Alicia ignored the warning, in the midst of her drunkenness, she continued with her mockery of the board, shouting see nothing happens, and then out of her mouth came some words so sacrilegious that she would forever regret having uttered them from the madhouse where she lives in our days.

   This tablet is a sham, just like the supposed demons that give it power! Just as he finished those words, the laughter and applause of a thick and tenebrous voice was heard, which captured all those present in absolute terror. From the darkness of the forest, a tall, intimidating-looking man walked in the direction of Alicia, while the rest of his companions were immobile like statues of salt, just watching, naïve girl, have you never heard the old saying? Beware of invoking the Devil at Easter, because he may appear to you!

Translated with DeepL Translator

Thank you for reading

This story is fictional and does not represent anyone in particular.

This is an Original Story written by @susurrodelmisterio for Hive