Descubrir la Iniciativa de @damarysvibra, "Viaje introspectivo", fue una grata sorpresa para mí. La idea de hacer un viaje de introspección a través de la danza y la música me pareció fascinante. Este ejercicio consiste en explorar cuatro piezas musicales diferentes, cada una con un ritmo único, para conectar con nuestro cuerpo y nuestras emociones de una manera profunda. La propuesta me atrajo de inmediato porque siempre he buscado maneras de comprender mejor mis sentimientos y de liberar la tensión a través de la expresión corporal. En estas semanas, he estado lidiando con mucho estrés y sentía la necesidad urgente de liberar mi energía negativa. Agradezco sinceramente esta iniciativa, ya que me brindó una oportunidad para soltar la presión acumulada y encontrar un espacio para la autoexploración y el alivio emocional.
Ejercicio
Danza Húngara Número 5 de Johannes Brahms
Al escuchar la Danza Húngara Número 5 de Brahms, sentí una oleada de energía que parecía invadir cada rincón de mi ser. La melodía era vibrante y dinámica, lo que me impulsó a saltar y moverme con gran entusiasmo. Las piernas se convirtieron en el centro de esta experiencia, moviéndose sin parar al ritmo contagioso de la música. Era como si toda mi energía se concentrara en cada paso y giro, sumergiéndome en un estado de alegría pura. La postura corporal que más me encajó fue una actitud de constante movimiento, donde saltaba y giraba, sintiendo una vivacidad que parecía renovarse con cada nota.
En un Bosque de la China
Por otro lado, "En un Bosque de la China" no logró resonar conmigo de la misma manera. A pesar de mi intento de conectar con la melodía, no pude encontrar el ritmo que me impulsara a moverme. Me sentí algo desconectada, y la música no me ofreció la motivación esperada. Mi postura fue bastante estática, simplemente de pie sin mucho interés en bailar. Fue un contraste interesante con la energía de la primera pieza, y me hizo reflexionar sobre cómo cada música puede afectar nuestro estado de ánimo de manera tan diferente.
Na Man Euh Nuh de Kim Hyun Ah (Soundtrack del drama Escalera al cielo)
"Na Man Euh Nuh" es una canción que me lleva de regreso a un pasado lleno de emociones intensas. Este drama surcoreano es increíblemente emocional, y su melodía siempre me transporta a momentos de sufrimiento y unidad. Al escucharla, sentí una avalancha de sentimientos que me abrumó hasta el punto de llorar. La canción trae a la superficie recuerdos profundos y me recuerda la conexión entre el dolor y la esperanza. Mis movimientos fueron suaves y tranquilos, enfocándome en mover principalmente los brazos y las manos de manera fluida. Eventualmente, me senté para permitir que las lágrimas fluyeran libremente, abrazando los sentimientos que la canción evocó. La postura que más asocié con esta pieza fue la de movimientos lentos y fluidos, terminando en una posición sentada, permitiendo que la melodía me envolviera por completo.
Chayanne - Madre Tierra
Finalmente, "Madre Tierra" de Chayanne me sorprendió con su energía alegre y contagiosa. No pude evitar bailar con una gran sonrisa en el rostro, moviendo todo mi cuerpo al ritmo de la música. Las piernas, los brazos y las caderas se movían con una libertad total, disfrutando cada segundo de la melodía. La canción me hizo sentir una felicidad desbordante y una conexión profunda con el ritmo. Mi postura corporal fue de movimiento completo, sintiendo la música en cada parte de mí y permitiéndome experimentar la alegría pura que la canción transmitía.
Identificándome con el Aire
Al revisar el cuadro de características de cada elemento, me di cuenta de que el aire es el que más me representa. Soy alguien que inicia proyectos con entusiasmo, pero a veces los deja a medio camino, siempre buscando nuevas ideas y cambios. El aire simboliza ese cambio constante y la búsqueda de novedades que tanto me atrae. Me encanta la sensación de libertad y fluidez que representa el aire en mi vida.
Sin embargo, también reconozco que tengo un poco de cada elemento en mí. A veces necesito la estabilidad de la tierra, la pasión del fuego o la fluidez del agua para mantenerme equilibrada. Entender y equilibrar estos elementos es un desafío constante, pero también una oportunidad para crecer y encontrar armonía en mi día a día. La introspección a través de esta experiencia corporal me ha permitido conectar con aspectos más profundos de mí misma y apreciar la importancia de cada elemento.
Discovering @damarysvibra’s "Introspective Journey" initiative was a pleasant surprise for me. The idea of taking an introspective journey through dance and music seemed fascinating. This exercise consists of exploring four different musical pieces, each with a unique rhythm, to connect with our bodies and emotions in a profound way. The proposal immediately attracted me because I have always sought ways to better understand my feelings and release tension through body expression. These past few weeks have been very stressful, and I felt an urgent need to release my negative energy. I am sincerely grateful for this initiative, as it gave me the opportunity to release accumulated pressure and find a space for self-exploration and emotional relief.
Exercise
Hungarian Dance No. 5 by Johannes Brahms
Listening to Brahms' Hungarian Dance No. 5, I felt a surge of energy that seemed to invade every corner of my being. The melody was vibrant and dynamic, pushing me to jump and move with great enthusiasm. My legs became the focus of this experience, moving nonstop to the infectious rhythm of the music. It was as if all my energy was concentrated in each step and spin, immersing me in a state of pure joy. The body posture that fit me best was one of constant movement, jumping and spinning, feeling a liveliness that seemed to renew with every note.
In a Chinese Forest
On the other hand, "In a Chinese Forest" did not resonate with me in the same way. Despite my attempt to connect with the melody, I couldn't find the rhythm that would motivate me to move. I felt somewhat disconnected, and the music didn't offer the expected motivation. My posture was quite static, simply standing without much interest in dancing. It was an interesting contrast to the energy of the first piece and made me reflect on how each music can affect our mood so differently.
Na Man Euh Nuh by Kim Hyun Ah (Soundtrack of the drama Stairway to Heaven)
"Na Man Euh Nuh" is a song that takes me back to a past full of intense emotions. This South Korean drama is incredibly emotional, and its melody always transports me to moments of suffering and unity. Listening to it, I felt a wave of feelings that overwhelmed me to the point of tears. The song brings deep memories to the surface and reminds me of the connection between pain and hope. My movements were gentle and calm, focusing on moving mainly my arms and hands fluidly. Eventually, I sat down to let the tears flow freely, embracing the feelings the song evoked. The posture I most associated with this piece was slow, fluid movements, ending in a seated position, allowing the melody to envelop me completely.
Chayanne - Madre Tierra
Finally, "Madre Tierra" by Chayanne surprised me with its joyful and infectious energy. I couldn't help but dance with a big smile on my face, moving my whole body to the rhythm of the music. My legs, arms, and hips moved with total freedom, enjoying every second of the melody. The song made me feel overwhelming happiness and a deep connection to the rhythm. My body posture was one of complete movement, feeling the music in every part of me and allowing myself to experience the pure joy the song conveyed.
Identifying with Air
When reviewing the chart of the characteristics of each element, I realized that air is the one that represents me the most. I am someone who starts projects with enthusiasm but sometimes leaves them halfway, always seeking new ideas and changes. Air symbolizes that constant change and search for new things that attract me so much. I love the feeling of freedom and fluidity that air represents in my life.
However, I also recognize that I have a bit of each element within me. Sometimes I need the stability of the earth, the passion of the fire, or the fluidity of the water to stay balanced. Understanding and balancing these elements is a constant challenge but also an opportunity for growth and finding harmony in my daily life. Introspection through this bodily experience has allowed me to connect with deeper aspects of myself and appreciate the importance of each element.
