Meditar es estar en perfecta calma. Si nuestra mente se aquieta y silencia se acallan los ruidos, que distraen nuestra atención y, que nos roban la energía constantemente.
En esta experiencia observaremos nuestro cuerpo y nuestra mente, sin juzgarlos, para lograr que los aspectos positivos y negativos de la mente se vuelvan neutros, es decir, salir de la polaridad en la que nos encontramos cotidianamente
Al igual que una ducha diaria limpia tu cuerpo, una meditación diaria despeja tu mente subconsciente y, ayuda a permanecer en el aquí y en el ahora.
Pero ¿qué beneficios nos deja?
Calma la ansiedad
Disminuye el estrés
Aumenta la inteligencia emocional
Mejora la memoria
Reduce las inflamaciones
Refuerza el sistema inmunológico
Mejora estados depresivos.
También ordena la mente y las funciones físicas del cuerpo, fomenta la creatividad y ahuyenta la postergación.
Inclusive ayuda en la creación de nuevas neuronas ya que al meditar se segregan hormonas relacionadas con la alegría y la felicidad, responsables de este crecimiento.
Aunque solo sea por estas causas ya valdría la pena meditar!!!!!.
Para realizar la meditación existen varios métodos; los cuales crean un ambiente interno que nos desconecta del cuerpo-mente, generando así un estado de atención concentrada.
Esta atención puede ser sobre:
a) La respiración. Nos concentramos en tomar y botar el aire.
b) La visualización. La más sencilla consiste en ver físicamente un objeto externo, simple, como una flor, una vela encendida, un cristal, una imagen religiosa de tu agrado, cualquier lugar que te agrade, etc pero no tiene que ser totalmente real, puedes imaginarte un lugar único y personalizado y explorarlo hasta llegar a un estado de completa calma.
c) La repetición. Se fundamenta en decir palabras o afirmaciones positivas, sencillas, primero audibles y luego en silencio. Ejemplo: paz, amor, gracias. En el caso de tener alguna inclinación religiosa podemos utilizar: OM Mani Padme HUm usado por budistas tibetanos; Jesus, Aleluya, KYRIE ELEISON, Christie Eleison usado por los católicos
d) El movimiento. Se basa en centrarse en lo que estamos haciendo en el momento presente (caminando, trotando, cocinando, bañándote, practicando Qigong, yoga, etc). Te llegan los pensamientos, pero piensa donde estas, por ejemplo ¿estás caminando?. Entonces olvídate de toda sensación, no luches contra los pensamientos, imágenes, sentimientos e intenta concentrarte en el movimiento de los pies. Después de dar el primer paso, detente por un momento antes de dar el siguiente paso. Solo un pie deberá estar en movimiento cada vez. Mientras practiques la meditación caminando, intenta concentrarte únicamente en el movimiento de tus pies. Intenta despejar tu mente y concentrarte en la conexión entre tus pies y la tierra.
Estos métodos se pueden realizar por separado, al principio, y luego combinarlos.
!!!Espero así contribuir a tu bienestar!!!