Origen
El establecimiento de la Comandancia en La Plata ocurre en momentos en que la guerra contra la dictadura de Batista en la Sierra Maestra deja de ser de constantes movimientos y comienza a transformarse de una guerra de posiciones.
Allí Fidel, estableció su Comandancia conformada por varias instalaciones que no solo garantizaban seguridad para él y su guarnición, sino que también mantenían la vitalidad de varios servicios necesarios para la guerrilla como un hospital y la casa donde radicó Radio Rebelde, por solo citar algunos.
Contra La Plata lanzó el enemigo su más poderosa ofensiva jamás nunca vista antes en toda la guerra, la que fue rechazada gracias a la valentía de los rebeldes y la pericia de sus principales jefes militares y desde aquí, oportunamente, irrumpiría de manera incontenible, la ofensiva estratégica final que desencadenaría en el enero victorioso de 1959.
Ubicación
El terreno que hoy ocupa la Comandancia General del Ejército Rebelde en La Plata pertenecía al campesino Osvaldo Medina Parra, fundador del legendario Quinteto Rebelde, quien había salido huyendo con su familia desde Palma Soriano en Santiago de Cuba ante las amenazas y atrocidades del régimen por aquellos lares.
La selección del lugar estuvo determinada por su ubicación al centro de la zona de operaciones del Primer Frente Oriental José Martí, por sus características geográficas y topografía de difícil acceso y por la colaboración brindada hasta entonces por las familias campesinas de la región.
A kilómetro y medio del Alto del Naranjo y avanzando hacia el oeste se llega a la casa del Santaclarero, la primera de las instalaciones que conforman el conjunto de La Plata, y luego en igual marcha más al oeste se alcanza la base de operaciones del territorio rebelde.
Historia
Fue a partir de mayo de 1958, ya transcurrido año y medio de vida nómada en la Sierra Maestra, cuando se establece de manera permanente la Comandancia General del Ejército Rebelde en La Plata.
Hasta ese momento la lucha guerrillera se había caracterizado por la movilidad constante. Comandancias había habido allí donde estuviera Fidel.
La táctica esencial de entonces sería la defensa y consolidación de un territorio base desde el cual emprender acciones decisivas para la derrota militar del enemigo.
En la Comandancia de La Plata llegaron a existir cerca de una veintena de instalaciones integradas al monte de forma tal que jamás pudieron ser descubiertas por el enemigo.
A Celia Sánchez se debió la singular idea de construir estas casas sin talar un solo árbol, sin nivelar un solo pedazo de terreno. De ahí que casi todas estén edificadas sobre el aire, en plena falda de la loma, a la mano de Celia se debieron también los mantos, las flores y los tantos detalles de belleza y sensibilidad en el seno de este medio agreste.
Ni un solo árbol se taló, ni un solo pedazo de tierra se niveló, en muchos casos utilizando árboles vivos como horcones.
Las viviendas construidas tienen ventanas abatibles de madera y están elevadas sobre pilotes de madera recia, aprovechando y salvando la abrupta topografía.
Las distintas construcciones se enlazan por medio de escalinatas, con escalones de madera y tierra en las partes más difíciles, también hay pequeños puentes de madera.
Son excepción de este tipo de arquitectura la casa de Santaclarero y la de los Medina, que fueron edificadas por ellos mismos a partir de sus propios gustos y posibilidades.
Entre sus instalaciones emblemáticas destacan la Casa de Fidel, la Emisora Radio Rebelde, la Casa de la Prensa o Casa de Casitas, Casa de los transeúntes o visitantes, Cocina de Morán, Casa de Faustino y la Casa de Las Marianas, entre otras.
Se contaba además con un Hospital, Tienda, Polvorín, Taller de armas, explosivos y de confecciones; Almacenes, la Tasajera y la Cárcel de Puerto Malanga.
Actualmente en la Comandancia General del Ejército Rebelde en La Plata radica un museo que ofrece al visitante una resumida visión de las singularidades y características de este lugar de significación tan especial en la historia de la Revolución Cubana.