Está es una de las frases que suelo decirle a Dios: dame de Beber de ese manantial que hay en tu presencia, es algo maravilloso cuando vemos a Jesús como esa agua de vida. En la biblia hay varios escenarios que hablan de este tema el primero de ellos es cuando Jesús le pide a la mujer agua que estaba sacando del pozo, y le dice bien:
Cuando bebas de esta agua volverás a tener sed, pero si bebés del agua que yo doy, nunca más tendrás sed, porque esta agua sacia para la vida eterna.
En estos últimos tiempos que estamos viviendo cosas tan difíciles necesitamos esa agua de vida que nos da nuestro padre y descansará sobre esos pastos, solo así podemos tener fuerzas para seguir.
Declaramos que muchos en este tiempo beberán del agua de la vida y que las naciones sanarán.