De mi hermosa ciudad, uno de los sitios más auténticos y sanos, espiritualmente hablando, a mi gusto, es el Iris jazz Club. En medio de tanta rutina reguetonera, cambiar el ritmo llenando el alma de buena música resulta mágico.
Zulema, una mujer con voz de Diosa, engalana las tardes de sábado, de 7:00 a 9:00 pm. Dos horas para relajar el espíritu con Blues y Jazz. Escucharla es todo un lujo.
El servicio gastronómico no es muy variado, al menos no hoy 😆, pero el buen ambiente vale la pena. Les adelanto que la Cerveza Cristal está en $220, la coctelería en $350 y tienen Mojito, Canchánchara, Cuba Libre, entre otros. Yo estaba deseosa de un café y la dependienta amablemente me lo trajo desde una instalación cercana, pues, en el Iris no había. Recuerdo que tiempo atrás sí tomé café alguna que otra vez en este sitio, pero, ya no brindan ese servicio según me dijeron.
Zulema interpreta temas muy variados, tanto en su composición sonora como en origen geográfico, lo cual dota a su repertorio de una cosmopolita diversidad. Canta en inglés, portugués y francés. Disfruté muchísimo las canciones de la Vieja Trova Cubana, temas de Bola de Nieve, Juan Formel y del Beny, llevados al Jazz.
En resumen, una tarde hermosa, que finalizó con abrazos y mi gratitud infinita a tan talentosa artista santiaguera.
