Jensen Huang, CEO de la empresa fabricante de tarjetas de video (GPU), expresó que las criptomonedas son reales y el mundo tiene que adaptarse a ellas.
Estas declaraciones fueron ofrecidas luego de que la compañía viera un aumento mayor al esperado en sus ganancias durante el último cuarto del año anterior. La demanda cada vez mayor de estos equipos por parte de los mineros ha creado escasez en el mercado, lo que ha significado un incremento importante en su valor.
Por su parte la vicepresidenta ejecutiva, Colette Kress, afirmó que la gran demanda de GPU en el mercado de criptomonedas superó sus expectativas y que el ingreso recibido es mayor al del cuarto de año previo, aunque dice que es difícil cuantificar esta suma. De todas formas aseguran que esta cantidad es pequeña en relación a los otros sectores.
Sin embargo, Kress asegura que se mantendrán enfocados en su mercado inicial, debido a la volatilidad del ecosistema de criptoactivos. Además, informan que los jugadores de videojuegos se ven frustrados por la incapacidad de encontrar tarjetas de video a precios razonables, debido a la escasez generada por los mineros.
Con respecto a esto, Huang expresó que los minoristas son los responsables de establecer los precios en la escasez actual y dejó en claro que la compañía le ha pedido a estos negocios que se enfoquen en los jugadores y no en los mineros.
“Estamos trabajando muy duro para sacar tarjetas de video al mercado para los jugadores”, dijo Huang. Una de estas soluciones, implementada por la tienda estadounidense Micro Center, es la de ofrecer descuentos en el precio de la tarjeta gráfica si el cliente adquiere el resto de los componentes para armar una PC.
De todas formas, los directivos informaron que, al menos en su caso, la mayor demanda no viene de parte de mineros, puesto que el número de ventas de GPU para artefactos de realidad virtual ha aumento en más de 3 dígitos, así como los juegos GForce y los carros automáticos. Esta confluencia de demandas de parte de distintos sectores es lo que ha incrementado cuantiosamente las ventas de la compañía.
A pesar de esas declaraciones, la cantidad de personas que se dedica a la minería va en aumento y muchas empresas y localidades han decidido sumarse a este negocio, como el pueblo suizo de Gondo o el gobierno de Canadá, que instó a los mineros a usar el excedente de la electricidad producida en su país.