“Joven Blake, es tiempo de saber la verdad”
“No entiendo Anciano”
“Él tiene razón Blake, el verdadero motivo por el cual me has vuelto a despertar”
Era evidente que algo le preocupaba a Timayus, su corazón lo dejaba en evidencia, mientras mas se aceleraba, mas se aceleraba el mío, pero no sentía miedo, era emoción, como un deseo inherente de cumplir un propósito y eso hacia que se llenara de emoción.
“Ve con el Blake, yo los alcanzare en un momento y nunca te alejes de la gema”
Con tanta confusión y emoción había olvidado por completo la gema, ¿Dónde estaba? De la impresión al ver a Timayus la deje caer, es un alivio que no le pasara nada, debía de tener mas cuidado de ahora en adelante con ella, si algo le pasaba era posible que le pasara algo al mismo Timayus.
Luego de regresar nuevamente a la tienda estaba listo para algunas preguntas y por supuesto para muchas respuestas.
No fue necesario que hiciera alguna pregunta, para que el anciano comenzar a explicarme las cosas, la gema era nada más y nada menos que, El Ojo de Timayus, o así lo llamaron en la antigüedad, no me extraña su color era igual al de Timayus, pero ¿Por qué Ojo? Luego simplemente me dijo cosas que ya había mencionado, como lo de ser un jinete y otras más, nada relevante en realidad.
Todas las preguntas que tenia en mi mente cuando regresábamos a la tienda se habían ido, no encontraba manera de hacerlas, o simplemente me parecían poco importantes para realizarlas, ¿Qué debía hacer? Acaso solo tenia que seguir escuchando hasta que fuera el final, que otra cosa podía hacer sin preguntas que formular.
“Blake, toma la piedra”
“¿Timayus?”
“Toma la piedra y solo concéntrate en mí y veras lo que sucede”
¿Cómo era posible? Era Timayus, pero mas pequeño, impresionante, de una bestia tan grande reducida al tamaño de un pequeño Huron bebe.
“Puedo cambiar te tamaño si tú lo necesitas”
“Impresionante Timayus”
“También podrás hacer muchas otras cosas que solo creías posibles en sueño”
“¿A qué te refieres?”
“Lo iras descubriendo a medida que mis poderes vuelvan”
Sentía mucha intriga por las palabras de Timayus, no ganaba nada destrozando mi cabeza pensando en las posibilidades o a lo que se refería, tenia que darle tiempo para que el solo me mostrara a que se refería con sus palabras.
“Blake, tienes que ver esto”
El anciano me mostraba un pergamino, se notaba lo antiguo que era, debía de ser tratado con mucho cuidado para no dañarle.
“¿Qué es?”
“Solo tú puedes saberlo”
Tenia un escrito que no entendía en lo más mínimo, era un idioma que nunca había visto, no se parecía al latín ni mucho menos a cualquiera que allá visto en libros de historia.
“Es el idioma de los Jinetes Blake”
“¿De los Jinetes Timayus?”
“Si, los Jinetes tenían su propio idioma para proteger sus secretos de la Orden en la gran guerra”
“Pero como poder leerlo si no entiendo nada de lo que dice”
“Tranquilo, el tiempo hará que tú también recuerdes muchas cosas de tu pasado”
Solo podía tener calma, hasta que Timayus volviera a tener sus poderes como me dijo, pero ¿Por qué tuvo que despertó? Y ¿Quién es la Orden?