Sin lugar a dudas, una de las noticias que más impactaron al mundo en esta semana fue la muerte de Sudán, un ejemplar macho de rinoceronte blanco del norte, su deceso deja a sólo dos hembras de esta subespecie. Pero, ¿a qué se debe su inminente extinción?
Para empezar, el rinoceronte blanco y su primo, el rinoceronte negro, pertenecen a un selecto club de especies animales africanas: los cinco grandes, que también incluyen a animales como el león, el leopardo, el elefante africano y el búfalo. Este término de los cinco grandes está estrechamente relacionado con la cacería, de hecho, se acuño para designar a las especies animales más difíciles de cazar, debido a su gran tamaño y ferocidad. En otras palabras, cazar uno de estos te daba cierto estatus. Sin embargo, ya este término no se utiliza para la actividad que originalmente fue implementado, sino que se usa como estrategia de mercadeo para el turismo en las sabanas del continente negro.
Aunque a los rinocerontes ya no se los cazan por trofeo, todavía su existencia sigue amenazada, y es debido a la cacería furtiva, su cuerno es bastante cotizado en el mercado negro. Inclusive su precio, aproximadamente 57.000€, llega a superar al oro y a la cocaína, y lo más increíble del caso, es que ese cuerno no tiene nada de especial, está hecho del mismo material que nuestro pelo y uñas, la queratina. Entonces ¿Por qué ese valor tan exagerado? Pues para ello debemos trasladarnos al lejano oriente.
Una de las razones por la cual China es reconocida, es por su medicina tradicional, la cual existe por más de 2500 años, y aunque usted no lo crea, considera al cuerno del rinoceronte como un afrodisiaco y como cura para diersos malestares. Sí, los chinos creen que un cuerno compuesto por el mismo material de nuestro pelo y uñas es un potenciador sexual (…), y lo peor del caso es que su demanda es muy alta y con las leyes de protección, han hecho que su valor aumente más.
¿Existe una solución para esta problemática? Sí, tenerlos como animales de granja. No, no es broma, de hecho, se está aplicando en Sudáfrica. El principal impulsor de esta (a primera vista) descabellada idea es John Hume, un jubilado hombre de negocios que amaso una gran fortuna, y que con eso compro un terreno para su finca, y posteriormente, empezó a comprar sus primeros ejemplares. Hoy en día tiene más de 1500 ejemplares, lo que empezó como un hobbie al comprar un terreno para criar especies exóticas amenazadas, se convirtió en un compromiso con el animal. Lo que hace con ellos, con la ayuda de sus empleados, sedan y cortan el cuerno del animal para luego subastarlos, algo preferible a encontrarse con un ejemplar muerto por envenenamiento o por un disparo de un cazador furtivo.
No obstante, por su peculiar granja de animales, el señor Hume se ha ganado enemigos provenientes de las organizaciones conservacionistas, quienes alegan que lo ideal sería acabar con el comercio de los cuernos de estos paquidermos. Sin embargo, acabar con el comercio a base de prohibiciones es bastante complicado, si tomamos en cuenta que la medicina china tradicional está muy arraigada en la cultura de la gente del lejano oriente. Además, los asiáticos no son de cambiar sus costumbres y creencias por más supersticiosas o desactualizadas que sean, tanto así que en China todavía se celebra el año nuevo chino, aunque reciban el año el primero de enero.
En mi opinión en este caso en particular, lo mejor que se puede hacer para salvar a estas bestias es cortarle los cuernos, sea que estén en una granja o en un parque nacional para luego venderlos. Aunque haya leyes que prohíban su caza y comercio, siempre va a surgir y va haber un establecimiento que venda sus cuernos en el mercado negro, haciendo que los esfuerzos de conservar esta especie sean técnicamente en vano. Y para ser sincero, prefiero mil veces ver una imagen como esta que la de un rinoceronte muerto
Links de referencia:
1- El mundo
2- The cult
4- Salud Bio